La tragedia ha golpeado a la comunidad de Beldar Ka Pura, en Gwalior, India, dejando una estela de dolor e indignación. Una joven de tan solo 24 años, Rani Kushwaha, ha perdido la vida a manos de su propio padre, Badam Singh Kushwaha, en un brutal acto de violencia doméstica. El escenario de este horrendo crimen fue, irónicamente, a escasos metros de la comisaría de Janakganj, lo que añade una capa adicional de consternación a la ya de por sí desgarradora situación.

Según los informes policiales, la tragedia se desencadenó por una disputa familiar relacionada con dinero. Badam Singh Kushwaha, quien, según testimonios, lucha contra la adicción y las dificultades económicas desde hace años, atacó a su hija Rani tras una acalorada discusión. El relato de los hechos, reconstruido a partir de testimonios y las primeras investigaciones, describe una escena escalofriante: Singh, en un acto de brutalidad inimaginable, arrojó chile en polvo a los ojos de su hija para inmovilizarla y, posteriormente, le asestó varias puñaladas en el abdomen. La joven falleció prácticamente en el acto, sin posibilidad de recibir atención médica.

La madre de Rani, Bhagwati Bai, con el corazón destrozado, ha compartido con la prensa local el calvario que la familia ha vivido durante los últimos años. Relató cómo su esposo, tras sufrir un accidente que lo dejó con una discapacidad en una pierna durante la pandemia de Covid-19, perdió su estabilidad laboral y se refugió en el alcohol, lo que desencadenó un ciclo de violencia doméstica. Bhagwati Bai describió cómo Badam Singh sustraía con frecuencia dinero de la pequeña tienda familiar para financiar su adicción, reaccionando con agresividad ante cualquier intento de detenerlo. Rani, la hija asesinada, era quien con mayor firmeza se oponía al comportamiento de su padre, lo que había generado numerosas discusiones previas entre ambos.

El día del trágico suceso, según las investigaciones preliminares, la discusión que culminó con el asesinato de Rani se originó por un nuevo intento de Singh de tomar dinero de la tienda. En un arranque de furia incontrolable, el hombre tomó un cuchillo y atacó a su hija, asestándole múltiples puñaladas que acabaron con su vida. Los gritos y la acalorada discusión que precedieron al crimen fueron escuchados por varios vecinos, quienes al acercarse al lugar se encontraron con la desgarradora escena. Inmediatamente alertaron a las autoridades, quienes lograron detener a Badam Singh Kushwaha en el mismo lugar de los hechos, impidiendo su huida.

El sargento Dharamveer Yadav, en declaraciones a la prensa, confirmó que el detenido ya contaba con antecedentes de consumo excesivo de alcohol y episodios violentos. Si bien las autoridades sospechan que el móvil del crimen es una combinación de problemas económicos, adicciones y conflictos familiares, la investigación continúa abierta para esclarecer completamente las circunstancias que llevaron a este terrible desenlace. Badam Singh Kushwaha permanece bajo custodia policial y se espera que en los próximos días sea presentado ante un juez para enfrentar cargos por asesinato. Mientras tanto, la comunidad de Beldar Ka Pura llora la pérdida de Rani y exige justicia para la joven víctima de esta brutal tragedia familiar. El caso ha conmocionado a la sociedad india y reabre el debate sobre la necesidad de abordar con mayor eficacia el problema de la violencia doméstica y la adicción al alcohol.