20 de septiembre de 2025 a las 06:55
Oaxaca: Bienestar para todas las familias.
La transformación de Oaxaca se palpa, se respira en el aire, en el aroma a tierra mojada y copal que envuelve sus valles y montañas. No se trata solo de cifras, aunque los números hablan por sí solos: un millón cuatrocientos setenta y cuatro mil doscientos noventa y seis beneficiarios de los Programas para el Bienestar. Imaginen la magnitud del impacto, la cantidad de familias oaxaqueñas que hoy tienen un respiro, una oportunidad, gracias a este apoyo histórico. Treinta y siete mil seiscientos sesenta y siete millones de pesos invertidos en el bienestar de Oaxaca, una cifra que resuena con la fuerza de la esperanza, con la promesa de un futuro más próspero.
Y es que Oaxaca, corazón cultural de México, cuna del Humanismo Mexicano, merece toda nuestra atención, todo nuestro apoyo. En sus raíces indígenas, en la riqueza de sus tradiciones, se encuentra la esencia misma de nuestra identidad. Es un honor ser testigos de este momento histórico, de este renacimiento que florece en cada comunidad, en cada hogar oaxaqueño.
Desde los adultos mayores que reciben su pensión con la dignidad que merecen, hasta los jóvenes que construyen su futuro con el apoyo de becas y programas de formación, pasando por las personas con discapacidad que encuentran un respaldo sólido en el gobierno, la red de bienestar se extiende por todo el territorio oaxaqueño. Las becas Benito Juárez, la Pensión para el Bienestar de las Personas con Discapacidad, Jóvenes Construyendo el Futuro, son mucho más que programas sociales: son herramientas que empoderan, que abren puertas, que transforman vidas.
La Pensión Mujeres Bienestar, una iniciativa pionera que reconoce el invaluable aporte de las mujeres a la sociedad, se consolida como un pilar fundamental en la construcción de un México más justo e igualitario. Y la beca universal Rita Cetina, un impulso para que nuestros jóvenes sigan estudiando, sigan soñando, sigan creciendo.
La salud, un derecho fundamental, también está en el centro de la transformación. Salud Casa por Casa, un programa que lleva atención médica directamente a los hogares de las personas adultas mayores y con discapacidad, refleja el compromiso de un gobierno cercano a la gente, un gobierno que se preocupa por el bienestar de todos.
Pero la transformación no se limita a los programas sociales. La infraestructura también juega un papel crucial en el desarrollo de Oaxaca. El Tren Interoceánico, una obra de gran envergadura que conectará el Pacífico con el Atlántico, abrirá nuevas oportunidades comerciales y generará empleos en la región. La modernización del Puerto de Salina Cruz, el mejoramiento de las carreteras, la ampliación de la carretera costera, la construcción de caminos artesanales, la modernización del aeropuerto de Puerto Escondido, son piezas clave de un puzzle que se va armando para impulsar el progreso de Oaxaca.
Y no podemos olvidar la importancia del agua, un recurso vital para el desarrollo. La construcción de la presa Margarita Maza y de dos distritos de riego, garantizará el acceso al agua para las comunidades y fortalecerá el sector agrícola. La construcción de una planta de reciclaje de basura, una apuesta por la sostenibilidad y el cuidado del medio ambiente. Más preparatorias y un plantel de la Universidad Nacional Rosario Castellanos, una inversión en la educación, en el futuro de Oaxaca.
Vivienda para el Bienestar, un programa que brinda la oportunidad de tener un hogar digno a miles de familias oaxaqueñas. La construcción de hospitales y centros de salud, un compromiso con la salud y el bienestar de la población.
La coquizadora de Salina Cruz, un proyecto que impulsará la industria y generará empleos. La creación de Centros LIBRE para las mujeres en cada municipio, un espacio seguro para las mujeres, donde puedan encontrar apoyo y empoderamiento. Y por primera vez, los pueblos originarios del estado reciben recursos del FAISPIAM, un reconocimiento a su riqueza cultural y a su importancia en la construcción de un México diverso e incluyente.
Oaxaca está cambiando, está creciendo, está floreciendo. Y este es solo el comienzo de una nueva era de prosperidad y bienestar para todos los oaxaqueños.
Fuente: El Heraldo de México