19 de septiembre de 2025 a las 03:20
UNAM campus Tijuana abre sus puertas
La esperanza se palpa en el aire tijuanense. Un nuevo capítulo se escribe en la historia educativa de Baja California con la inauguración de la primera etapa del campus Tijuana de la Universidad Nacional Rosario Castellanos. No se trata simplemente de ladrillos y cemento, sino de la construcción de futuros, de la materialización de sueños para miles de jóvenes que ahora ven más cerca la posibilidad de acceder a la educación superior. Un derecho, no un privilegio, como bien recalcó la subsecretaria de Prevención de las Violencias, Esthela Damián, durante el acto inaugural. Sus palabras resonaron con fuerza, recordándonos la importancia de la equidad en el acceso al conocimiento, un pilar fundamental para el desarrollo individual y colectivo.
La presencia de figuras clave como la gobernadora Marina del Pilar Ávila y Rosaura Ruiz Gutiérrez, secretaria de Ciencia, Humanidades, Tecnología e Innovación, subraya la relevancia de este acontecimiento. No es una inauguración más, es una declaración de intenciones, un compromiso con el futuro de la juventud bajacaliforniana. La donación de tres hectáreas adicionales, anunciada por la gobernadora a través de sus redes sociales, es una muestra tangible de la apuesta por el crecimiento de esta institución y por la expansión de las oportunidades educativas. Imaginen el impacto que tendrá este espacio en los próximos años: aulas llenas de estudiantes ávidos de conocimiento, laboratorios equipados con tecnología de punta, y un ambiente vibrante de intercambio intelectual.
Más allá de la infraestructura, la Universidad Nacional Rosario Castellanos en Tijuana se presenta como un faro de esperanza. Con una oferta académica que incluye 11 licenciaturas gratuitas, tanto en modalidad presencial como en línea, la institución se adapta a las necesidades del siglo XXI, brindando flexibilidad y accesibilidad a más de 1,874 estudiantes. Y esto es solo el comienzo. La promesa de la apertura de programas de posgrado en un futuro cercano abre un abanico aún más amplio de posibilidades para aquellos que buscan especializarse y contribuir al avance del conocimiento en sus respectivas áreas.
Este nuevo campus no es solo un espacio físico, es un catalizador de cambio social. Es la semilla que germinará en profesionales capacitados, en ciudadanos comprometidos con el desarrollo de su comunidad. Es la inversión en un futuro más próspero para Tijuana, para Baja California y para México. La educación, como corazón de la transformación, late con fuerza en esta tierra fronteriza, y promete un futuro brillante para las nuevas generaciones. Los invitamos a seguir de cerca el desarrollo de este proyecto, a ser testigos del impacto positivo que tendrá en la vida de miles de jóvenes, y a celebrar juntos los logros que, sin duda, están por venir. La Universidad Nacional Rosario Castellanos en Tijuana es mucho más que un campus, es un símbolo de progreso, una apuesta por el futuro, y una razón para creer en un México mejor.
Fuente: El Heraldo de México