19 de septiembre de 2025 a las 21:20
Justicia para Papayita: Alto al acoso laboral
La tragedia que rodea el fallecimiento de Carlos Gurrola Arguijo, cariñosamente conocido como "Papayita", ha conmocionado a la comunidad de Torreón, Coahuila, y ha puesto en el centro de la discusión la problemática del acoso laboral. La supuesta "broma" que le costó la vida, el cambio de su agua por desengrasante, revela una preocupante realidad sobre la vulnerabilidad de los trabajadores y la falta de respeto a la dignidad humana en algunos entornos laborales.
Diecinueve días de agonía, tras sufrir severas quemaduras internas en tráquea, pulmones y vías respiratorias, marcaron el calvario de "Papayita", un hombre de 47 años que dedicaba su vida a labores de limpieza en un conocido supermercado local. La imagen de su lucha por la vida contrasta dramáticamente con la supuesta frivolidad de la acción que la provocó, dejando una profunda huella de indignación y dolor en la sociedad.
Más allá de la tragedia individual, el caso de "Papayita" destapa la compleja y a menudo silenciada realidad del mobbing o acoso laboral. El testimonio de su hermana, Alejandra Gurrola, dibuja un panorama desolador de agresiones sistemáticas: no solo la presunta sustitución del agua por desengrasante, sino también agresiones físicas, robo de comida, pinchaduras en las llantas de su bicicleta y amenazas para silenciarlo. Una serie de actos que, presuntamente, se fueron acumulando hasta culminar en este fatal desenlace.
La denuncia de la familia Gurrola añade otra capa de complejidad al caso, señalando presuntas irregularidades por parte del supermercado. La ausencia de personal médico en el lugar y el retraso de tres horas en el traslado de "Papayita" a una clínica, según su testimonio, habrían sido factores determinantes en el deterioro de su salud y su posterior fallecimiento. Estas acusaciones plantean interrogantes sobre la responsabilidad del centro de trabajo en la seguridad y bienestar de sus empleados, y la necesidad de protocolos claros y efectivos para atender emergencias.
La Fiscalía General del Estado de Coahuila, consciente de la gravedad del caso, ha iniciado una investigación exhaustiva. La revisión de las grabaciones de las cámaras de seguridad del supermercado es un paso crucial para esclarecer los hechos y deslindar responsabilidades. Sin embargo, la aparente evasión de responsabilidades por parte del supermercado, argumentando que "Papayita" era empleado de una empresa subcontratada, añade un nuevo obstáculo a la búsqueda de justicia. La familia, por su parte, exige que la empresa subcontratista dé la cara y asuma su parte de responsabilidad en esta tragedia.
El caso de "Papayita" no es un hecho aislado. Es un reflejo de una problemática social que exige una profunda reflexión sobre la cultura laboral y la necesidad de erradicar cualquier forma de violencia y acoso en el lugar de trabajo. La justicia para "Papayita" no solo implica el castigo a los responsables directos de su muerte, sino también la implementación de medidas que garanticen un ambiente laboral seguro y respetuoso para todos. Su historia debe servir como un llamado a la conciencia colectiva y un impulso para la creación de entornos de trabajo donde la dignidad humana sea el valor central.
Fuente: El Heraldo de México