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19 de septiembre de 2025 a las 07:10
¡Cangrejo en oreja de niño! 😱
¡Un cangrejo de paseo por un oído infantil! Parece el título de una película animada, pero esta historia, ocurrida en el sur de nuestro país, es completamente real. Imaginen la escena: un pequeño, Pablo, con lágrimas rodando por sus mejillas, se queja de una molestia en el oído. Su madre, Kitzia Mitre, intenta calmarlo prometiéndole una visita a la plaza comercial, un premio digno de un valiente. Pero la causa del llanto no es un simple dolor de oído, ¡no! Un pequeño cangrejo, en una aventura digna de un explorador en miniatura, había decidido convertir el oído de Pablo en su hogar temporal.
El video, compartido por la propia Kitzia en TikTok, nos muestra el momento crucial. Con la precisión de un cirujano, un pediatra, armado con unas pinzas, se acerca al oído del pequeño Pablo. La tensión se palpa en el aire. El cangrejo, seguramente tan sorprendido como todos los presentes, emerge lentamente, aturdido por el encuentro con el metal frío. Un suspiro colectivo de alivio recorre las redes sociales al confirmarse que tanto Pablo como el pequeño crustáceo están sanos y salvos.
Pero la historia no termina ahí. En medio del drama, entre el dolor y el temor infantil de perder la vista (una preocupación común en los niños ante situaciones desconocidas en sus oídos), Pablo, con un corazón del tamaño del océano, pregunta por el destino del pequeño invasor. "¿Le van a hacer daño al cangrejito?", inquiere con voz entrecortada por el llanto. La respuesta de su madre, quizás para calmarlo en ese momento, le confirma sus temores. Y entonces, el llanto de Pablo se intensifica, no por su propio malestar, sino por la posible suerte del pequeño cangrejo.
Este gesto de empatía, capturado en video y compartido con el mundo, ha conmovido a miles de internautas. En los comentarios de la publicación, se aplaude la nobleza del pequeño Pablo, quien, a pesar de estar atravesando una situación incómoda y dolorosa, se preocupa por el bienestar de una criatura tan pequeña e indefensa. Su preocupación nos recuerda la importancia de inculcar en los niños el respeto por todos los seres vivos, incluso los más pequeños e inesperados.
La historia de Pablo y el cangrejo nos deja varias reflexiones. Por un lado, nos recuerda la curiosidad innata de los niños, su capacidad de explorar el mundo con todos los sentidos, a veces con consecuencias inesperadas. Por otro, nos muestra la importancia de la empatía, la capacidad de ponerse en el lugar del otro, incluso en situaciones difíciles. Y finalmente, nos invita a reflexionar sobre la fragilidad de la vida y la necesidad de proteger a todas las criaturas que comparten nuestro planeta. Quién sabe, quizás este pequeño cangrejo, protagonista involuntario de esta aventura, inspire a futuras generaciones a cuidar y respetar el maravilloso mundo natural que nos rodea.
¿Y qué habrá sido del pequeño cangrejo? Esperemos que haya encontrado un hogar más adecuado que el oído de Pablo, quizás en alguna playa cercana, donde pueda continuar su vida en libertad. La historia no lo especifica, pero nos gusta imaginar que así fue, gracias a la preocupación de un niño con un corazón gigante.
Fuente: El Heraldo de México