19 de septiembre de 2025 a las 09:15
Bienestar para todos: Un presupuesto que nos une
El primer Paquete Económico de la administración Sheinbaum marca un hito en la consolidación de la Cuarta Transformación. No se trata simplemente de cifras y proyecciones, sino de la materialización de una visión de país donde el crecimiento económico no es un fin en sí mismo, sino un vehículo para alcanzar la justicia social. Este presupuesto, que asciende a la histórica cifra de 10.1 billones de pesos, es una apuesta audaz que busca equilibrar la responsabilidad fiscal con el bienestar de las y los mexicanos, especialmente de los más vulnerables.
La continuidad de los programas sociales, con una asignación de más de 987 mil millones de pesos, no es un simple acto de caridad, sino un reconocimiento de los derechos constitucionales y una inversión estratégica en el capital humano del país. Estos programas no son dádivas, son la base para construir un México más justo, equitativo y cohesionado, donde todos tengan la oportunidad de desarrollar su potencial. Son una apuesta por el futuro, un cimiento para un crecimiento sostenible e inclusivo que beneficie a todas y todos, no solo a unos cuantos.
En paralelo, la inversión en infraestructura continúa siendo un pilar fundamental para impulsar el desarrollo regional y nacional. Los proyectos ferroviarios, como el AIFA-Pachuca y Querétaro-Irapuato, no solo mejorarán la conectividad y la movilidad, sino que detonarán la economía de las regiones que atraviesan, generando empleos y oportunidades. Las nuevas carreteras, la modernización de las existentes y las obras hídricas estratégicas contribuirán a fortalecer la infraestructura del país, creando las condiciones necesarias para un crecimiento económico sólido y duradero. Además, el programa de tecnificación del campo, un sector crucial para la soberanía alimentaria, recibirá un impulso significativo, modernizando las prácticas agrícolas y mejorando la productividad. Todo esto, enmarcado en el Plan México, con una inversión equivalente al 2.5% del PIB, refleja la determinación del gobierno por construir un país más moderno, competitivo y conectado.
La disciplina fiscal que se refleja en este Paquete Económico es otro elemento clave. El déficit proyectado del 4.1%, junto con la estrategia para consolidar las finanzas públicas y mantener la deuda pública en un nivel sostenible, envía un mensaje de confianza a los inversionistas nacionales e internacionales. Esta prudencia en el manejo de las finanzas públicas es indispensable para garantizar la estabilidad macroeconómica y generar un clima propicio para la inversión y el crecimiento. La reacción positiva de los mercados financieros y de las principales instituciones bancarias ante estas medidas es una clara muestra de la solidez y la credibilidad de la política económica del gobierno.
La actualización de la política de ingresos, con medidas enfocadas en corregir desequilibrios históricos, también merece destacarse. Los impuestos a productos como bebidas azucaradas, cigarros industriales y productos con nicotina no buscan castigar, sino proteger la salud de la población y desincentivar el consumo de sustancias nocivas. Más allá de la recaudación, estas medidas representan una inversión en la salud pública, previniendo enfermedades como la diabetes, el cáncer y las enfermedades respiratorias, que generan un alto costo social y económico.
El Paquete Económico 2026 es, en definitiva, una propuesta integral y ambiciosa que refleja el compromiso del gobierno con el bienestar de la población y el desarrollo del país. En el Senado de la República, asumimos la responsabilidad de analizarlo con rigor y con un profundo sentido republicano, buscando siempre fortalecer la transformación que vive México. La Cuarta Transformación no se detiene; avanza con paso firme hacia un futuro de prosperidad compartida para todas y todos los mexicanos. Es una tarea colectiva que requiere del compromiso y la participación de todos los sectores de la sociedad. Estamos convencidos de que, trabajando juntos, podremos construir el México que soñamos, un país justo, próspero y en paz.
Fuente: El Heraldo de México