19 de septiembre de 2025 a las 04:15
Bermúdez en Toluca: ¿Rumbo al Altiplano?
La sombra de la corrupción se extiende más allá de las fronteras. El reciente caso de Hernán Bermúdez Requena, extitular de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana de Tabasco, expulsado de Paraguay y señalado como uno de los líderes de "La Barredora", nos muestra cómo las redes criminales buscan tejer sus hilos en diferentes territorios. Su llegada a México, envuelta en un velo de secretismo y cambios de ruta de último minuto, plantea interrogantes sobre la magnitud de sus operaciones y la posible complicidad que le permitió evadir la justicia durante un tiempo.
La figura de “El Abuelo”, como se le conoce en el bajo mundo, se dibuja con trazos oscuros. No solo se le acusa de corrupción, sino también de intentar establecer una red criminal en Paraguay, un país que lucha por mantener a raya el avance del crimen organizado. Su ingreso clandestino, saltando de Panamá a Brasil y finalmente a Paraguay, evidencia una planificación meticulosa para eludir los controles migratorios y operar en las sombras.
El hecho de que un sobrino de Bermúdez Requena haya sido aprehendido previamente en Paraguay añade una capa adicional de intriga a este caso. ¿Se trataba de un plan familiar para expandir sus operaciones criminales? ¿Existía una estructura ya establecida esperando la llegada de “El Abuelo”? Las autoridades paraguayas señalan que la presencia del exfuncionario en su territorio representaba una amenaza real, y su expulsión se convirtió en una prioridad para salvaguardar la seguridad nacional.
La clandestinidad en la que se movía Bermúdez Requena en Paraguay, prácticamente sin salir de la vivienda donde fue encontrado, no solo apunta a su deseo de pasar desapercibido, sino también a un posible temor a represalias. Las autoridades paraguayas sugieren que “El Abuelo” podría estar enfrentado a otros líderes del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) en México, lo que lo habría obligado a buscar refugio en otro país. Esta hipótesis abre una ventana a las pugnas internas que se viven al interior de estas organizaciones criminales, donde la traición y la violencia son moneda corriente.
La extradición de Bermúdez Requena a México y su traslado al penal de máxima seguridad "El Altiplano" marca el inicio de un nuevo capítulo en esta historia. La justicia mexicana tendrá ahora la tarea de desentrañar la compleja red de corrupción y criminalidad que se teje alrededor de este personaje y determinar su grado de responsabilidad en los delitos que se le imputan. La sociedad, atenta a cada detalle, espera que este caso sirva como ejemplo de que la justicia, aunque a veces lenta, alcanza a quienes se esconden en las sombras. La lucha contra la corrupción y el crimen organizado es una tarea continua que requiere la colaboración de todos los países para cerrar el paso a quienes buscan lucrar con la inseguridad y el miedo.
Fuente: El Heraldo de México