18 de septiembre de 2025 a las 03:35
Descubren mina de oro gigante: ¿dónde está?
Nevada, tierra de leyendas y ahora, también, tierra de oro. El descubrimiento en Fourmile por parte de Barrick Gold Corporation no es solo una noticia para la industria minera, es un hito que resonará en los mercados globales y que podría redefinir el panorama aurífero del siglo XXI. Imaginen: 1,4 millones de onzas de oro, un tesoro resplandeciente extraído de las entrañas de la tierra, con una ley de 11,8 gramos por tonelada. Y esto es solo el comienzo. Los recursos inferidos, un indicio tentador de la riqueza que aún permanece oculta, apuntan a la asombrosa cifra de 6,4 millones de onzas adicionales. Estamos hablando de un potencial de producción anual que oscila entre las 600.000 y las 750.000 onzas de oro, una auténtica lluvia dorada que se extendería por más de 25 años.
Este no es un hallazgo fortuito, es el resultado de la exploración minuciosa y la aplicación de tecnología de vanguardia. Barrick Gold, con su experiencia y visión estratégica, ha desenterrado un tesoro que promete transformar el futuro de la compañía y dejar una huella imborrable en la industria. Las estimaciones internas, aún más audaces, hablan de un depósito que podría alcanzar entre 32 y 34 millones de toneladas de oro, con leyes que rozan los 16 gramos por tonelada. Cifras que marean, que nos obligan a detenernos y a comprender la magnitud de este descubrimiento.
Pero más allá de los números, Fourmile representa una oportunidad. Una oportunidad para Nevada, que consolida su posición como un epicentro de la producción aurífera mundial. Una oportunidad para Barrick Gold, que añade a su cartera un activo estratégico de escala y ley excepcionales, una combinación cada vez más rara en el panorama minero actual. Y una oportunidad para el mercado global del oro, que verá nacer un nuevo gigante, un referente para las futuras exploraciones y explotaciones.
Sin embargo, la prudencia es clave. Si bien las cifras iniciales son deslumbrantes, es importante recordar que parte de ellas corresponden a recursos inferidos, sujetos a la confirmación a través de estudios más exhaustivos. El camino hacia la plena producción está pavimentado con desafíos: la obtención de permisos ambientales, el marco regulatorio en constante evolución, las fluctuaciones de los mercados financieros y las inclemencias del clima, factores que pueden influir en el desarrollo del proyecto.
La inversión proyectada, estimada entre 1.500 y 1.700 millones de dólares, es un testimonio de la confianza de Barrick Gold en el potencial de Fourmile. Con costos de producción previstos entre 850 y 900 dólares por onza, y costos sostenidos totales entre 650 y 750 dólares por onza, el proyecto se perfila como una inversión sólida y rentable.
El futuro de Fourmile está aún por escribirse, pero una cosa es segura: este descubrimiento ha abierto un nuevo capítulo en la historia de la minería del oro. El mundo observa con expectación el desarrollo de este proyecto, un faro de esperanza en un contexto de incertidumbre económica global. ¿Será Fourmile la mina de oro del siglo XXI? El tiempo lo dirá. Mientras tanto, la fiebre del oro ha vuelto a Nevada, más brillante y prometedora que nunca.
Fuente: El Heraldo de México