17 de septiembre de 2025 a las 07:50
TikTok: ¿Diversión o peligro?
El caso de una niña de 13 años en Carolina del Sur, al borde de la sobredosis tras intentar un reto viral de TikTok con difenhidramina, ha encendido las alarmas sobre los peligros ocultos en las redes sociales. La menor, tras ingerir una cantidad excesiva del antihistamínico, experimentó alucinaciones y una taquicardia alarmante, con un ritmo cardíaco que alcanzó los 200 latidos por minuto. Su madre, aterrada, la trasladó de urgencia al hospital, donde los médicos lograron estabilizarla. Este incidente destapa la oscura realidad de los retos virales que incitan a los jóvenes a consumir medicamentos de forma irresponsable, buscando efectos psicotrópicos.
La madre, en una entrevista con la televisora local WMBF, relató el angustioso momento en que encontró a su hija con alucinaciones y un ritmo cardíaco desbocado. Su relato, cargado de preocupación y desesperación, describe cómo la niña, influenciada por videos en TikTok, ingirió una cantidad considerable de difenhidramina, creyendo erróneamente que podría drogarse. El testimonio de la madre es un llamado de atención a padres y educadores sobre la necesidad de supervisar la actividad online de los menores y fomentar un diálogo abierto sobre los riesgos de los retos virales.
La difenhidramina, un antihistamínico comúnmente usado para aliviar síntomas de alergias y resfriados, se ha convertido en la protagonista de un peligroso reto viral. Los videos, que circulan principalmente en TikTok, muestran a jóvenes ingiriendo grandes cantidades del fármaco buscando experimentar sus efectos alucinógenos. Esta práctica, altamente peligrosa, puede provocar graves consecuencias para la salud, incluyendo somnolencia extrema, taquicardia, alucinaciones, convulsiones, e incluso la muerte.
Expertos de Poison Control, una organización sin fines de lucro especializada en intoxicaciones, advierten sobre los riesgos letales de la difenhidramina cuando se consume en dosis elevadas. Los especialistas subrayan que, aunque el medicamento se vende sin receta, su uso indebido puede tener consecuencias devastadoras. Además, hacen un llamado a las plataformas de redes sociales para que implementen medidas más efectivas para controlar y eliminar contenido que promueva el consumo irresponsable de fármacos. La historia de la niña de 13 años no es un caso aislado. Poison Control menciona otro incidente, aún más trágico, de una niña de 14 años que, tras una sobredosis de difenhidramina, fue ingresada en un centro psiquiátrico y, meses después, encontrada muerta en su domicilio. La autopsia reveló una concentración del fármaco en su sangre 500 veces superior a la terapéutica. Estos casos evidencian la urgente necesidad de abordar el problema de los retos virales que incitan al consumo irresponsable de medicamentos, y de educar a los jóvenes sobre los peligros reales que se esconden detrás de estas tendencias online. La responsabilidad compartida entre padres, educadores y plataformas de redes sociales es crucial para proteger la salud y el bienestar de los adolescentes.
La madre de la niña de 13 años, profundamente afectada por la experiencia, describe la situación como “aterradora” y una “llamada de atención”. Su testimonio, cargado de angustia y preocupación, es un llamado a la reflexión sobre la importancia de la comunicación familiar y la supervisión del uso de las redes sociales. “No quiero que ningún otro padre pase por esto”, afirma, instando a la comunidad a tomar conciencia sobre los peligros que acechan a los jóvenes en el mundo digital. La experiencia de esta familia nos recuerda la fragilidad de la adolescencia y la necesidad de proteger a nuestros hijos de las influencias negativas que pueden encontrar en internet. La educación, la comunicación y la supervisión son las herramientas clave para prevenir tragedias y guiar a los jóvenes hacia un uso responsable y seguro de las redes sociales.
Fuente: El Heraldo de México