17 de septiembre de 2025 a las 18:40
Justicia para Silverio: México exige respuestas a EE. UU.
La tragedia de Silverio Villegas González en Chicago ha vuelto a poner sobre la mesa la vulnerable situación de la comunidad mexicana en Estados Unidos. No se trata solo de un caso aislado, sino de un reflejo de las dificultades y los peligros a los que se enfrentan a diario nuestros connacionales al cruzar la frontera en busca de una vida mejor. La respuesta del gobierno mexicano, a través de una nota diplomática, es un paso importante, pero insuficiente. Es necesario exigir una investigación exhaustiva y transparente que esclarezca las circunstancias de la muerte de Silverio y que se haga justicia. Más allá de las condolencias y el apoyo a la familia, que por supuesto son fundamentales, se requiere una acción firme y contundente que garantice la protección de los derechos humanos de todos los mexicanos en el extranjero.
La violencia y la discriminación que sufren nuestros migrantes no pueden ser toleradas. Debemos recordar que son personas que, en muchas ocasiones, se ven obligadas a dejar su hogar y a sus seres queridos en busca de oportunidades que les son negadas en su propio país. Llegan a un nuevo territorio con la esperanza de un futuro mejor, y a menudo se encuentran con la hostilidad y la indiferencia. Es imperativo que las autoridades estadounidenses tomen medidas concretas para prevenir estos actos de violencia y para asegurar que los responsables sean llevados ante la justicia. La impunidad solo fomenta la repetición de estos lamentables sucesos.
La colaboración entre México y Estados Unidos en materia migratoria es esencial. No se trata solo de un asunto de política exterior, sino de una cuestión de humanidad. Ambos países deben trabajar juntos para encontrar soluciones que beneficien a ambas partes y que, sobre todo, protejan la dignidad y los derechos de los migrantes. Es necesario impulsar programas que faciliten la integración de los mexicanos en la sociedad estadounidense, que promuevan el respeto a su cultura y que les brinden acceso a servicios básicos como la educación y la salud.
La visita del primer ministro canadiense, Mark Carney, a México abre una ventana de oportunidad para fortalecer la cooperación entre ambos países, no solo en el ámbito comercial, sino también en la defensa de los derechos de los migrantes. Canadá ha demostrado ser un país receptivo y abierto a la inmigración, y su experiencia puede ser valiosa para México en la búsqueda de soluciones a los desafíos migratorios. El T-MEC, como marco de colaboración trilateral, debe ser aprovechado para impulsar una agenda común en materia migratoria que priorice la protección de los derechos humanos y la cooperación entre los tres países.
La atención a la familia de Silverio Villegas González y la investigación de su muerte son prioritarias, pero no podemos quedarnos ahí. Debemos ir más allá y trabajar en la construcción de un futuro en el que ningún mexicano tenga que arriesgar su vida para buscar un futuro mejor, un futuro en el que la migración sea una opción y no una necesidad, un futuro en el que los derechos humanos de todos sean respetados y protegidos, sin importar su origen o su condición migratoria. Este es el compromiso que debemos asumir como sociedad y como gobierno.
Fuente: El Heraldo de México