15 de septiembre de 2025 a las 03:55
CDMX: Desmantelan narco-bodegas y cultivos de marihuana
La sombra del narcotráfico se extendía silenciosamente bajo el bullicio cotidiano de la ciudad, camuflada entre la arquitectura urbana de tres alcaldías clave: Benito Juárez, Cuauhtémoc e Iztacalco. Un minucioso trabajo de inteligencia, llevado a cabo por fuerzas federales y capitalinas, desentrañó la compleja red criminal que operaba en la clandestinidad, culminando en un operativo quirúrgico que desmanteló bodegas repletas de marihuana y un sofisticado invernadero donde se cultivaba la hierba. Imaginen la escena: agentes ingresando simultáneamente en los inmuebles, la sorpresa de los criminales, el olor acre de la marihuana inundando el aire.
Más allá del simple decomiso de droga, este operativo representa un duro golpe a las estructuras del crimen organizado. No se trataba de pequeños distribuidores, sino de una célula criminal con una organización jerárquica, liderada por un individuo que ahora se encuentra tras las rejas. La detención de este cabecilla, junto con otros tres miembros de la banda, es un triunfo significativo en la lucha contra el narcotráfico, desarticulando una pieza clave en el engranaje delictivo que buscaba envenenar nuestras calles.
El descubrimiento del invernadero en Iztacalco es particularmente revelador. No se trataba de un cultivo improvisado, sino de una operación a gran escala, con 1,153 plantas de marihuana cuidadosamente cultivadas. Esto nos habla de una inversión considerable, de una planificación meticulosa y de la ambición de expandir su influencia en el mercado negro. La imagen de ese invernadero, un oasis verde en medio del concreto, contrasta dramáticamente con el daño que su producto habría causado en la sociedad.
Las autoridades no solo incautaron las plantas, sino también dos bolsas con marihuana lista para su distribución, una bolsa con un polvo amarillo – que seguramente será analizado para determinar su composición –, una báscula digital y otros elementos que evidencian la magnitud de la operación. En Benito Juárez, el escenario era similar: 139 paquetes y un costal con 35 kilos de marihuana, listos para ser distribuidos en las calles de la ciudad. Toneladas de un veneno que, de no haber sido interceptado, habría llegado a manos de nuestros jóvenes, alimentando la espiral de adicción y violencia.
Este operativo conjunto entre fuerzas federales y capitalinas demuestra la importancia de la colaboración y la coordinación en la lucha contra el crimen. Es un ejemplo de cómo el trabajo de inteligencia, la planificación estratégica y la acción decidida pueden desmantelar redes criminales y proteger a nuestra comunidad. La investigación continúa, las autoridades federales ya se encuentran analizando la evidencia recolectada, siguiendo el rastro del dinero y buscando identificar a otros posibles implicados. La batalla contra el narcotráfico es una lucha constante, pero con cada operativo exitoso como este, nos acercamos un paso más a la construcción de una ciudad más segura y un futuro más esperanzador. La ciudadanía puede estar tranquila, sabiendo que hay hombres y mujeres trabajando incansablemente para proteger nuestras calles y desmantelar las redes criminales que buscan sembrar el caos.
Fuente: El Heraldo de México