14 de septiembre de 2025 a las 15:50
Ricky Hatton: La trágica muerte del boxeador
El mundo del boxeo está de luto. Una noticia que ha caído como un jarro de agua fría ha recorrido el planeta: Ricky "The Hitman" Hatton, el ídolo de Manchester, el guerrero que llenaba estadios y hacía vibrar a las multitudes con su estilo agresivo y su corazón de león, ha sido encontrado sin vida en su hogar en Greater Manchester. La noticia, aún en desarrollo, ha dejado a fans, compañeros y rivales conmocionados, incrédulos ante la repentina partida de una figura tan icónica.
Hatton, quien se preparaba para un regreso al ring tras años de retiro, tenía una pelea pactada para diciembre. Este regreso, esperado con ansias por una legión de seguidores que soñaban con volver a ver al "Hitman" en acción, se ha transformado en una tragedia que nadie podía prever. A sus 44 años, Hatton parecía listo para un último baile, una oportunidad más de demostrar su pasión por el deporte que lo llevó a la cima. ¿Qué lo motivaba a volver? ¿La nostalgia de la gloria pasada? ¿El deseo de probarse a sí mismo una vez más? Las preguntas quedan flotando en el aire, sin respuesta, aumentando el pesar por una carrera truncada de forma tan abrupta.
Su trayectoria, marcada por épicas batallas y victorias memorables, lo convirtió en un héroe local, un símbolo de la ciudad de Manchester. Desde sus inicios en el boxeo amateur hasta sus conquistas de títulos mundiales en la categoría welter súper ligero, Hatton siempre demostró una entrega inquebrantable, un espíritu combativo que lo hacía conectar con la gente. Sus peleas eran un espectáculo garantizado, un derroche de energía y bravura que electrizaba al público. Recordamos sus victorias ante Kostya Tszyu y José Luis Castillo, combates que quedaron grabados en la memoria colectiva del boxeo. Pero también recordamos sus derrotas, ante Floyd Mayweather Jr. y Manny Pacquiao, que demostraron que incluso los guerreros más valientes pueden caer. Sin embargo, incluso en la derrota, Hatton siempre supo levantarse, demostrando una resiliencia admirable que lo convirtió en un ejemplo para muchos.
Más allá de los títulos y los récords, Hatton fue un personaje carismático, un hombre del pueblo que nunca olvidó sus raíces. Su conexión con los fans era genuina, basada en la humildad y la cercanía. Su sonrisa, siempre presente, transmitía una alegría contagiosa que lo hacía aún más querido. Hoy, esa sonrisa se ha apagado, dejando un vacío inmenso en el corazón de quienes lo admiraban.
Las circunstancias que rodean su fallecimiento aún se están investigando. La incertidumbre y la conmoción reinan en el ambiente. Mientras las autoridades trabajan para esclarecer los hechos, el mundo del boxeo llora la pérdida de uno de sus grandes protagonistas. Ricky "The Hitman" Hatton, el guerrero de Manchester, ha colgado los guantes para siempre. Su legado, sin embargo, permanecerá vivo en la memoria de todos aquellos que vibraron con su pasión y su entrega dentro y fuera del ring. Descanse en paz, campeón.
Fuente: El Heraldo de México