El mundo digital arde con una nueva polémica que tiene como protagonistas a Galilea Montijo y Ricardo Peralta, y todo por un corsé. Lo que parecía un simple intercambio de comentarios sobre una prenda de diseñador se ha convertido en una batalla campal en redes sociales, desatando una cascada de opiniones divididas y avivando las llamas de la controversia.

Recordemos el detonante: Ricardo Peralta, a través de una publicación, comentó que él y Galilea Montijo compartían una pieza del talentoso diseñador Iván Ávalos. La conductora, luciendo espectacular en el corsé de herrería durante la transmisión de La Casa de los Famosos, no tardó en responder, y ahí fue donde la chispa encendió la pradera.

Durante el programa Hoy, Montijo aclaró que, si bien ambas prendas provenían del mismo diseñador, la suya había sido hecha a medida para ajustarse perfectamente a su figura. La frase que desató la tormenta fue: "Que por cierto, Ricardo Peralta, no es el tuyo, mi rey es del mismo diseñador, pero no tenemos la misma cintura, hermana". Una declaración aparentemente inocente que, sin embargo, ha sido interpretada por muchos como una humillación directa hacia Peralta.

Las redes sociales, siempre atentas a la mínima controversia, se han convertido en un hervidero de comentarios. Muchos usuarios han criticado duramente a Montijo, acusándola de soberbia y de haber reaccionado de manera desproporcionada al comentario de Peralta. Argumentan que la alusión a la cintura fue innecesaria y denota una falta de sensibilidad, especialmente considerando la historia de Peralta con Arath de la Torre, con quien no terminó en buenos términos tras su participación en La Casa de los Famosos. Algunos incluso especulan que la reacción de Montijo fue una especie de "venganza" orquestada en defensa de su amigo De la Torre.

Otros, en cambio, defienden a la conductora, argumentando que simplemente estaba aclarando una situación y que sus palabras no tenían la intención de ofender a nadie. Consideran que se está magnificando un incidente sin importancia y que la reacción de las redes sociales es exagerada. Aseguran que la interpretación de la frase como una humillación es una muestra de la hipersensibilidad que impera en el mundo digital.

Sea cual sea la postura, lo cierto es que este incidente ha vuelto a poner sobre la mesa la delicada línea que separa la libertad de expresión del respeto a los demás en el ámbito público. ¿Fue la respuesta de Montijo una simple aclaración o una muestra de arrogancia? ¿Es la reacción de las redes sociales justificada o una exageración? El debate sigue abierto y la polémica continúa alimentándose con cada nuevo comentario, convirtiendo un simple corsé en el símbolo de una controversia mucho más profunda. ¿Qué opinas tú?