La tragedia tiñó de luto el asfalto de la México-Pachuca la tarde del jueves. Un escenario que, lamentablemente, se repite con demasiada frecuencia en nuestras carreteras, dejando una estela de dolor y preguntas sin respuesta. Una mujer, acompañante en una motocicleta, perdió la vida en un brutal accidente a la altura de Ecatepec, mientras que su pareja, el conductor, lucha por su vida en un hospital de la zona. La escena, captada por las cámaras de otros automovilistas y rápidamente difundida en redes sociales, es impactante: una camioneta embiste a la pareja y, sin detenerse a prestar auxilio, se da a la fuga. La violencia del impacto arroja a la mujer al pavimento, donde pierde la vida de manera instantánea.

El video, que circula por las redes, ha generado una oleada de indignación entre los usuarios. Muchos se preguntan cómo es posible que un acto tan despiadado quede impune. La huida del conductor no solo agrava la tragedia, sino que evidencia una falta de responsabilidad y empatía que nos interpela como sociedad. ¿Hasta cuándo seguiremos tolerando la irresponsabilidad al volante? ¿Qué medidas se deben tomar para que estos hechos no se repitan?

La rápida respuesta de los servicios de emergencia, incluyendo la Guardia Nacional y la Policía Municipal, permitió acordonar la zona y atender al conductor herido. Sin embargo, la labor de los paramédicos no pudo salvar la vida de la mujer, cuyo cuerpo fue trasladado por el Servicio Médico Forense para realizar la necropsia de ley. El cierre de tres de los cuatro carriles de la autopista provocó un colapso vial en dirección a Ecatepec y Pachuca, recordándonos la fragilidad de nuestra movilidad y el alto costo que pagamos por la imprudencia.

Mientras el esposo de la víctima, aún conmocionado por la tragedia, rinde su declaración ante la Fiscalía mexiquense, la búsqueda del conductor fugitivo se convierte en una prioridad. Las autoridades analizan las imágenes del video y las pistas recabadas en el lugar del accidente con la esperanza de identificarlo y llevarlo ante la justicia. La Fiscalía del Estado de México mantiene un hermetismo informativo que, si bien se entiende en aras de la investigación, genera incertidumbre y angustia entre la población. ¿Se logrará dar con el responsable? ¿Se hará justicia para la víctima y su familia?

Este trágico suceso nos recuerda la importancia de la prudencia y el respeto a las normas de tránsito. No podemos permitir que la indiferencia y la irresponsabilidad sigan cobrando vidas en nuestras carreteras. Es necesario un cambio de mentalidad, una mayor conciencia vial que nos permita transitar de manera segura y responsable. Mientras tanto, la familia de la víctima espera respuestas, justicia y que la memoria de su ser querido no se pierda en la fría estadística de los accidentes viales. Es imperativo que la sociedad se una en un clamor por la justicia y la seguridad vial, para que tragedias como esta no se vuelvan a repetir. La pregunta que queda en el aire es: ¿cuántas vidas más se deben perder para que la impunidad deje de ser la norma en nuestras carreteras?