Logo
NOTICIAS
play VIDEOS

Inicio > Noticias > Medio Ambiente

5 de septiembre de 2025 a las 02:45

Tornado azota San Cristóbal: ¿Volverá a ocurrir?

La tranquilidad de San Cristóbal de Las Casas se vio interrumpida por la furia de la naturaleza. Un inusual tornado, danzando entre las montañas chiapanecas, dejó a su paso un rastro de asombro y preocupación. Árboles centenarios se inclinaron ante la fuerza del viento, mientras láminas y techos de viviendas se desprendían como hojas secas en otoño, dibujando una escena que parecía sacada de una película. Este fenómeno, tan ajeno al paisaje habitual de la ciudad, nos obliga a reflexionar sobre la cambiante realidad climática que enfrentamos.

El Dr. Marcelino García Benítez, reconocido investigador del Instituto de Investigación y Gestión de Riesgos y Cambio Climático de la UNICACH, nos ilumina sobre las causas de este inusual evento. Según el experto, la conjunción de la temporada de lluvias, la peculiar topografía de la región y el creciente calentamiento urbano crearon el escenario perfecto para la formación de este cono de viento. Imaginen: corrientes de aire frío descendiendo de las montañas, chocando violentamente contra el aire caliente atrapado en la superficie, intensificado por el concreto y el asfalto de la ciudad. Esta mezcla explosiva, como una reacción química descontrolada, dio origen al tornado que sorprendió a los sancristobalenses.

Aunque el espectáculo pueda parecer aterrador, el Dr. García Benítez aclara que el principal peligro de estos fenómenos no radica en la fuerza directa del viento contra las personas, a menos que su velocidad supere la resistencia del cuerpo humano, sino en los objetos que pueden convertirse en proyectiles. Láminas, tejas, ramas, cualquier elemento suelto puede ser levantado por el viento y transformarse en un peligro. A esto se suma la posibilidad de lluvias intensas, que suelen acompañar estos eventos, incrementando el riesgo de inundaciones y deslaves.

La pregunta que surge de inmediato es: ¿volverá a suceder? El Dr. García Benítez, con la cautela propia de un científico, explica que este es un fenómeno extremo y atípico, pero que la posibilidad de que se repita, tanto en San Cristóbal como en otras zonas con características similares, como la meseta de Comitán, no puede descartarse. El cambio climático, como un director de orquesta invisible, está alterando las partituras del clima a nivel global, aumentando la frecuencia e intensidad de eventos extremos en diversas regiones del mundo. Chiapas, con su variada geografía y su clima complejo, no es la excepción.

Sin embargo, el investigador nos tranquiliza al afirmar que no debemos esperar una serie continua de tornados como los que azotan el centro de Estados Unidos. La dinámica atmosférica de la región es diferente, y si bien la variabilidad climática incrementa la probabilidad de eventos extremos, no significa que nos convertiremos en un callejón de tornados.

Este evento, más allá del susto y los daños materiales, debe servirnos como una llamada de atención. Es una invitación a reflexionar sobre nuestra relación con el entorno, sobre la importancia de la gestión de riesgos y la adaptación al cambio climático. Es un recordatorio de que la naturaleza, en su inmensa poder, puede manifestarse de formas inesperadas, y debemos estar preparados. La prevención, la información y la conciencia ciudadana son nuestras mejores herramientas para enfrentar los desafíos que nos presenta un clima cada vez más impredecible.

Fuente: El Heraldo de México