
3 de septiembre de 2025 a las 22:00
Rubio y Sheinbaum: Diálogo crucial para la seguridad
La reciente reunión entre el Secretario de Estado de los Estados Unidos, Marco Rubio, y la Presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, ha generado un intenso debate sobre la cooperación bilateral en materia de seguridad. Este encuentro, crucial para ambos países, pone de manifiesto la creciente preocupación por el poderío de los grupos del narcotráfico, ahora considerados organizaciones terroristas por algunos sectores en Estados Unidos. Larry Rubin, presidente de The American Society of Mexico, ha subrayado la importancia de este diálogo, calificándolo de "sumamente importante" para el gobierno estadounidense, especialmente en el contexto de la lucha contra estas organizaciones criminales.
La declaración de Rubin resalta la prioridad que la administración estadounidense, incluso más allá de la presidencia de Donald Trump, otorga a la desarticulación de estas redes de narcotráfico. Su influencia, que se extiende tanto en México como en Estados Unidos, representa una amenaza significativa para la seguridad de ambos países. De ahí la necesidad, según Rubin, de una "muchísima colaboración continua" con el gobierno mexicano. Esta colaboración, lejos de ser un evento aislado, se perfila como una estrategia a largo plazo para disminuir el impacto de estas organizaciones en la región.
El análisis de Rubin sugiere que la presión por parte de Estados Unidos para combatir estos grupos no disminuirá en el futuro próximo. A pesar de que Donald Trump ya no ocupa la presidencia, su influencia en las políticas de seguridad, particularmente en lo que respecta a la lucha contra el narcotráfico, parece persistir. Este enfoque, que cataloga a ciertos grupos del narcotráfico como terroristas, podría implicar un endurecimiento de las estrategias y una mayor exigencia de colaboración por parte de México.
La visita del Secretario Rubio, en este contexto, adquiere una relevancia aún mayor. Su mensaje, que enfatiza la necesidad de la cooperación mexicana, refleja la preocupación estadounidense por la magnitud del problema. Este problema, que ha afectado a ambos países durante décadas, requiere, según Rubin, de un esfuerzo conjunto para encontrar soluciones efectivas. La colaboración entre México y Estados Unidos se presenta, por lo tanto, como un elemento indispensable para abordar este desafío compartido y construir un futuro más seguro para la región.
La complejidad de la situación exige un análisis profundo de las implicaciones de clasificar a estos grupos como terroristas. ¿Qué impacto tendría esta designación en las estrategias de seguridad? ¿Cómo afectaría la cooperación bilateral? Estas son algunas de las preguntas que surgen a raíz de las declaraciones de Larry Rubin y que requieren un debate amplio y profundo. La lucha contra el narcotráfico, lejos de ser un asunto aislado, se configura como un reto transnacional que demanda soluciones integrales y una cooperación internacional sólida y permanente. El futuro de la seguridad en la región depende, en gran medida, de la capacidad de ambos países para trabajar juntos y enfrentar este desafío de manera eficaz.
Fuente: El Heraldo de México