Una ola de esperanza recorre el sistema de salud mexicano. El IMSS, en una apuesta decidida por fortalecer la atención médica y ampliar el acceso a servicios de calidad, se prepara para inaugurar ocho nuevos hospitales a lo largo y ancho del país. Esta ambiciosa iniciativa, liderada por el director Zoé Robledo, busca no solo aumentar la capacidad hospitalaria, sino también reducir la brecha existente entre la creciente demanda de servicios y la infraestructura disponible. La promesa de "ir mejor", resonando desde la mañanera, se materializa en ladrillos, quirófanos y tecnología de punta, ofreciendo un futuro más saludable para miles de mexicanos.

Imaginen la transformación que supondrá el Hospital General Regional No. 25 en Iztapalapa, una de las zonas más pobladas de la Ciudad de México. Con sus 278 camas, 40 consultorios y seis quirófanos equipados con tecnología de vanguardia, este coloso de la salud ofrecerá atención especializada en 35 disciplinas. Desde hemodiálisis hasta quimioterapia, pasando por consultas generales y cirugías complejas, el nuevo hospital se erige como un faro de esperanza en la lucha contra las enfermedades. Su próxima apertura en octubre, anunciada en presencia de la Jefa de Gobierno Claudia Sheinbaum, es un testimonio del compromiso con la salud pública.

Y la historia se repite en Puebla, con el Hospital General de Zona No. 36 San Alejandro. Con una capacidad similar al de Iztapalapa, este centro médico no solo iguala en número de camas y consultorios, sino que también incorpora servicios que antes no estaban disponibles, ampliando el espectro de atención médica y acercando la salud especializada a la población poblana. Octubre marcará un antes y un después en la historia de la salud en Puebla.

Pero la expansión no se detiene ahí. Diciembre traerá consigo la inauguración del Hospital General de Zona de Tula, en Hidalgo. Con un enfoque en la atención integral, este hospital contará con 298 camas, 36 consultorios y cuatro quirófanos, además de unidades especializadas en hemodiálisis y quimioterapia. 42 especialidades médicas estarán al alcance de la población hidalguense, garantizando una atención completa y de calidad.

Desde Sonora hasta Guanajuato, la red de nuevos hospitales se extiende, llevando consigo la promesa de una mejor atención médica. Navojoa y Guanajuato se suman a la lista de beneficiados, con hospitales equipados para atender las necesidades específicas de cada región. Consultorios, quirófanos, especialidades y tratamientos de vanguardia se ponen al servicio de la salud de los mexicanos.

Y la inversión en salud no se limita al IMSS. El ISSSTE, bajo la dirección de Martí Batres Guadarrama, también se suma a este esfuerzo con la ejecución de 16 obras en materia de salud. Desde unidades de medicina familiar hasta la modernización de hospitales existentes, el ISSSTE refuerza su compromiso con la salud de los trabajadores del estado. La demolición del viejo Hospital Doctor Gonzalo Castañeda en la Ciudad de México para dar paso a una nueva unidad médica es un símbolo de renovación y progreso.

Desde Coahuila hasta Oaxaca, desde Guerrero hasta Quintana Roo, las obras del ISSSTE se despliegan por todo el territorio nacional, llevando consigo la promesa de una atención médica más accesible y de mayor calidad. Ampliaciones, remodelaciones y nuevas construcciones se suceden, tejiendo una red de salud más robusta y eficiente. La atención a las comunidades indígenas, como la construcción de una clínica hospital en Cherán, Michoacán, refleja el compromiso con la inclusión y la equidad en el acceso a la salud.

En resumen, un futuro más brillante se dibuja en el horizonte de la salud mexicana. La inversión en infraestructura, la incorporación de tecnología de punta y la ampliación de servicios son la base de un sistema de salud más sólido y equitativo. El compromiso del IMSS y del ISSSTE con la salud de los mexicanos se traduce en acciones concretas que mejorarán la calidad de vida de miles de personas.