La tragedia envuelve nuevamente a Zacatecas. La esperanza se apaga para Ada Karina Juárez Jacobo, madre buscadora cuya incansable lucha por encontrar a su hija Goretty se vio truncada por la violencia que azota al estado. El fiscal Cristian Paul Camacho Osnaya confirmó el terrible desenlace: el cuerpo de Ada Karina fue hallado en San Luis Potosí, un día después de su desaparición forzada el pasado miércoles. Un dolor que se suma a la angustia de una familia que ya cargaba con la ausencia de Goretty.

La Fiscalía de Zacatecas, a pesar de no contar con una denuncia formal por parte de la familia, actuó de oficio desde el primer momento en que se tuvo conocimiento de la privación ilegal de la libertad de Ada Karina. Una llamada anónima al 911 activó todos los protocolos, movilizando a las corporaciones de seguridad y a la policía de investigación. La confirmación de la veracidad del reporte desencadenó una carrera contra el tiempo para dar con el paradero de la activista.

Las investigaciones, lideradas por el fiscal Camacho Osnaya, permitieron reconstruir la ruta que siguieron los captores de Ada Karina. Gracias a un intenso trabajo de inteligencia y a la ejecución de una orden de cateo, se logró dar con un inmueble en el municipio de Trancoso, donde se detuvo a dos individuos, uno originario de Durango y otro de San Luis Potosí. En el lugar se aseguraron dos armas de fuego, una larga y una corta, además de droga, cargadores, cartuchos y dos vehículos: una motocicleta y una camioneta Journey, que coincide con la descrita en las grabaciones de video que documentan el momento de la privación de la libertad de Ada Karina.

La Fiscalía ha profundizado en las investigaciones, realizando la inspección de cinco inmuebles, tres de ellos mediante inspección física y dos más con órdenes de cateo. El fiscal Camacho Osnaya reveló un dato estremecedor: los detenidos forman parte de una red de trata de personas y explotación sexual, lo que abre una línea de investigación sobre la posible victimización tanto de Ada Karina como de su hija Goretty.

La lucha contra la impunidad continúa. La Fiscalía trabaja incansablemente para ubicar y detener a los cómplices de los dos detenidos en Trancoso. Al mismo tiempo, se redoblan esfuerzos para encontrar a Goretty, cuya desaparición motivó la incansable búsqueda de su madre. La sombra de la trata de personas y la explotación sexual se cierne sobre este caso, añadiendo una capa más de complejidad y dolor a una tragedia que conmociona a Zacatecas y al país entero. La pregunta que resuena es: ¿cuántas madres buscadoras más tendrán que enfrentar este calvario antes de que la justicia prevalezca? La respuesta, sin duda, está en manos de las autoridades y en la voluntad de la sociedad para exigir un alto a la violencia.