
1 de septiembre de 2025 a las 12:25
México supera la recesión: futuro económico brillante
La economía mexicana respira. Tras un periodo de incertidumbre y pronósticos sombríos, el Banco de México (Banxico) ha inyectado una dosis de optimismo al elevar su proyección de crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) para 2025. El nuevo pronóstico del 0.6%, aunque modesto, representa un salto significativo desde el 0.1% anterior y aleja, al menos por ahora, el espectro de una recesión que preocupaba a analistas y ciudadanos por igual.
Este ajuste al alza se alinea con la tendencia observada en organismos internacionales como el Fondo Monetario Internacional (FMI), que recientemente revisó su pronóstico para México, pasando de una contracción del 0.3% a un crecimiento del 0.2%. Asimismo, coincide con el consenso de la Encuesta Citi México de Expectativas, que también ha mejorado su estimación para 2025. Se percibe un aire de cambio, una luz al final del túnel que invita a la esperanza.
Jonathan Heath Constable, subgobernador de Banxico, ha confirmado este cambio de panorama, afirmando que la discusión sobre una posible recesión está quedando atrás. Sin embargo, también ha señalado que un crecimiento del 0.6% no es suficiente para las necesidades del país, instando a la búsqueda de estrategias para impulsar un desarrollo económico más robusto.
La gobernadora de Banxico, Victoria Rodríguez Ceja, ha advertido que este escenario positivo depende de una serie de factores cruciales. La estabilidad en el panorama internacional, la evolución de la economía estadounidense, la ausencia de volatilidad en los mercados financieros y la gestión de los conflictos geopolíticos son elementos clave para el cumplimiento de esta proyección. Asimismo, la consolidación fiscal y la mitigación del impacto de fenómenos meteorológicos adversos juegan un papel fundamental en el desarrollo económico nacional.
A pesar del optimismo, Rodríguez Ceja ha mantenido la cautela, señalando que el balance de riesgos sigue inclinado a la baja. La incertidumbre en torno a la política comercial de Estados Unidos, un factor que puede influir en las decisiones de inversión y consumo tanto en México como en la región, continúa siendo una preocupación.
No obstante, existen también factores que podrían impulsar un crecimiento mayor al esperado. Un mejor desempeño de la economía estadounidense, un mayor aprovechamiento del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) y un aumento en la competitividad de ciertos productos mexicanos podrían generar un impulso adicional. Además, la reconfiguración de los procesos productivos en el marco del T-MEC y un impacto mayor al anticipado del gasto público podrían contribuir a un escenario económico más favorable.
En resumen, México se encuentra en una encrucijada. Si bien el panorama económico ha mejorado y la posibilidad de una recesión se ha alejado, la prudencia y la implementación de estrategias que impulsen el crecimiento son fundamentales para consolidar la recuperación y asegurar un futuro económico próspero. El camino hacia la estabilidad y el desarrollo económico requiere un esfuerzo conjunto, una visión clara y la capacidad de adaptarnos a un entorno global en constante cambio.
Fuente: El Heraldo de México