
1 de septiembre de 2025 a las 19:40
Culiacán: Decomiso de arsenal en cateo
La sombra del narcotráfico continúa acechando Sinaloa, pero las fuerzas del orden responden con contundencia. Un operativo conjunto, digno de una película de acción, ha desmantelado un importante arsenal en Culiacán, dejando al descubierto la persistente lucha contra el crimen organizado en la región. Imaginen la escena: agentes de la Agencia de Investigación Criminal (AIC) de la Fiscalía General de la República (FGR), respaldados por la élite de las fuerzas armadas mexicanas – la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), la Secretaría de Marina (Semar) y la Guardia Nacional (GN) –, irrumpiendo en un domicilio en el fraccionamiento Urbivilla del Cedro. No era una residencia cualquiera, sino un escondite estratégico para armas y drogas, un centro neurálgico en la red del narcotráfico.
El operativo, meticulosamente planeado y ejecutado, fue el resultado de un arduo trabajo de inteligencia que permitió a las autoridades identificar el inmueble y recabar las pruebas necesarias para obtener la orden de cateo. El juez de control, convencido de la solidez de la investigación, dio luz verde a la intervención, desencadenando una operación que sacudió la calma aparente de la urbanización.
El arsenal descubierto es impactante: 32 armas largas, capaces de sembrar el terror en las calles, junto a 5 armas cortas, probablemente destinadas a la protección personal de los delincuentes. A esto se suman cargadores y una cantidad considerable de cartuchos, suficiente para alimentar una guerra. Pero el hallazgo no se limitó al armamento. En el interior del inmueble, los agentes encontraron también 80 litros y 150 kilos de sustancias ilícitas, un duro golpe a las finanzas del crimen organizado. ¿Qué tipo de sustancias? Las autoridades aún no lo han revelado, pero la cantidad incautada sugiere una operación de gran envergadura.
La imagen del equipo táctico encontrado completa el escenario: chalecos antibalas, radios de comunicación, posiblemente visores nocturnos… Herramientas que transforman a delincuentes comunes en una fuerza paramilitar, una amenaza latente para la seguridad de la ciudadanía.
El inmueble, ahora bajo resguardo policial y con los sellos de la autoridad, se convierte en un símbolo de la lucha incansable contra el narcotráfico. Las evidencias, cuidadosamente recolectadas, serán pieza clave en la investigación que llevará a cabo el Ministerio Público. Se espera que este decomiso permita desentrañar la red criminal, identificar a los responsables y llevarlos ante la justicia.
Más allá del éxito operativo, este cateo envía un mensaje claro: las instituciones que integran el Gabinete de Seguridad están unidas y trabajando en coordinación para devolver la tranquilidad a Sinaloa. Es una batalla constante, una lucha sin tregua contra un enemigo invisible pero poderoso. La población sinaloense, cansada de la violencia, espera que este tipo de acciones se traduzcan en una paz duradera, en un futuro donde la seguridad no sea un privilegio, sino un derecho garantizado. La pregunta que queda en el aire es: ¿qué impacto tendrá este golpe en la estructura del narcotráfico en la región? Solo el tiempo lo dirá. Mientras tanto, las fuerzas del orden continúan vigilantes, preparadas para responder a cualquier amenaza y proteger a la ciudadanía.
Fuente: El Heraldo de México