La sombra del robo de autopartes se cierne sobre la Ciudad de México, un delito que afecta no solo el patrimonio de las víctimas, sino también la tranquilidad de toda la comunidad. En un enérgico golpe a estas redes delictivas, la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC), en una operación coordinada que parece sacada de una película de acción, logró desmantelar un auténtico cementerio de vehículos despiezados en la colonia San Felipe de Jesús, alcaldía Gustavo A. Madero. Imaginen la escena: una montaña de autopartes, aproximadamente 10 toneladas, apiladas en un inmueble, un testimonio silencioso del drama que viven a diario quienes sufren el robo de sus vehículos. Puertas de diferentes marcas, faros que ya no iluminarán el camino, cofres, calaveras, parrillas, fascias… un desolador paisaje de metal y plástico que representa la angustia de muchos.

Este operativo, digno de elogio, no fue producto de la casualidad, sino el resultado de un minucioso trabajo de inteligencia policial. Las denuncias ciudadanas, ese invaluable termómetro social, alertaron a las autoridades sobre la probable venta de autopartes ilegales en la zona. A partir de ahí, se inició un proceso de investigación que incluyó trabajos de gabinete y campo, un seguimiento preciso que culminó con la solicitud y obtención de la orden judicial para catear el inmueble. La precisión quirúrgica de la operación, llevada a cabo sin violencia y con estricto apego al protocolo de actuación policial, es un ejemplo del profesionalismo de nuestros cuerpos de seguridad.

La participación conjunta de la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México, la Secretaría de Marina, la Policía Estatal del Estado de México y la Guardia Nacional, demuestra la importancia de la coordinación interinstitucional en la lucha contra el crimen. Esta sinergia de fuerzas, un verdadero frente común contra la delincuencia, es fundamental para obtener resultados contundentes.

Es importante destacar que entre las autopartes recuperadas se encuentran piezas que coinciden con un vehículo reportado como robado el 27 de agosto en el municipio de Ecatepec, Estado de México. Este hallazgo abre una línea de investigación que podría conducir a la desarticulación de una red criminal más amplia, y brindar un poco de justicia a la víctima de este robo.

El predio, ahora sellado y bajo resguardo policial, se convierte en un símbolo de la lucha contra la impunidad. Las autopartes aseguradas, evidencia crucial en la investigación, quedaron a disposición de las autoridades ministeriales para la integración de la carpeta de investigación. Este caso nos recuerda la importancia de denunciar cualquier actividad sospechosa, ya que la colaboración ciudadana es esencial para combatir la delincuencia.

La SSC y la FGJ han reiterado su compromiso de continuar trabajando en coordinación con las demás instituciones del Gabinete de Seguridad para atender las denuncias ciudadanas y llevar ante la justicia a quienes atentan contra la seguridad de los habitantes de la Ciudad de México. La lucha contra el robo de autopartes es una tarea de todos, y este operativo exitoso nos demuestra que, con trabajo conjunto y determinación, es posible ganar terreno a la delincuencia y construir una ciudad más segura.