
27 de julio de 2025 a las 03:40
¡Incendio en vuelo de American Airlines!
El corazón de Denver se detuvo por unos instantes la tarde del sábado. Un aterrizaje que debía ser rutinario se convirtió en una escena digna de una película de acción. Las imágenes, que ya recorren el mundo a través de las redes sociales, muestran la aterradora visión de una rueda envuelta en llamas perteneciente a un Boeing de American Airlines en el Aeropuerto Internacional de Denver. El humo negro y denso, contrastando con el cielo de la tarde de Colorado, se alzaba como un presagio de desastre, mientras las sirenas de los camiones de bomberos rompían la calma habitual del aeropuerto.
A bordo del vuelo 295, procedente del Aeropuerto Internacional de Dallas-Fort Worth y con destino a la ciudad de las Montañas Rocosas, viajaban 157 pasajeros y 6 tripulantes. Imaginen la escena: la expectativa del aterrizaje, la alegría de llegar a destino, transformadas en segundos en una mezcla de miedo e incertidumbre. Según testimonios recogidos de algunos pasajeros, el impacto del aterrizaje se sintió con mayor fuerza de lo habitual, seguido de un ruido ensordecedor y vibraciones que recorrieron todo el fuselaje. Segundos después, el anuncio del capitán confirmaba sus peores temores: un problema en el tren de aterrizaje.
La rápida actuación de la tripulación fue crucial. En cuestión de minutos, y siguiendo los protocolos de emergencia, se desplegaron los toboganes inflables, permitiendo la evacuación de todos los pasajeros y la tripulación. Las imágenes muestran la angustia en los rostros de las personas, algunas con lágrimas en los ojos, otras con la mirada fija en el avión que aún emanaba humo. La eficiente coordinación entre la tripulación del avión y los servicios de emergencia del aeropuerto evitó que la situación se convirtiera en una tragedia.
Los bomberos, que llegaron al lugar en tiempo récord, lograron controlar rápidamente el incendio. Las llamas, que habían consumido la rueda y parte del tren de aterrizaje, fueron extinguidas con espuma especial, evitando que se propagaran al resto del avión. Afortunadamente, y según los informes oficiales, no se registraron heridos de gravedad. Algunos pasajeros fueron atendidos por inhalación de humo y contusiones leves sufridas durante la evacuación.
Este incidente reaviva el debate sobre la seguridad en la aviación. Si bien los incidentes de este tipo son poco frecuentes, la magnitud del susto vivido por los pasajeros del vuelo 295 nos recuerda la importancia del mantenimiento riguroso de las aeronaves y la constante capacitación de las tripulaciones. American Airlines ha emitido un comunicado lamentando el incidente y asegurando que colaborará plenamente con las autoridades en la investigación para determinar las causas del incendio. La Administración Federal de Aviación (FAA, por sus siglas en inglés) ya ha iniciado las pesquisas correspondientes y se espera que en las próximas semanas se tenga un informe preliminar. Mientras tanto, los pasajeros del vuelo 295 intentan recuperar la normalidad tras la traumática experiencia, agradecidos de haber salido ilesos de lo que pudo haber sido una verdadera catástrofe. El incidente sirve como un recordatorio de la fragilidad de la vida y de la importancia de estar preparados para lo inesperado.
Fuente: El Heraldo de México