Liliana Meza Peña, una figura cada vez más prominente en el sector de la limpieza en México, vuelve a estar en el ojo del huracán. Apodada ya como la "Reina de la Limpieza", su trayectoria está marcada por la controversia, con acusaciones de simulación y sobreprecios que la persiguen desde la licitación del Aeropuerto Internacional de la CDMX en 2021. A pesar de las denuncias y la anulación de contratos previos debido a incumplimientos, Meza Peña, a través de un entramado de empresas, ha logrado hacerse nuevamente con un jugoso contrato en la Terminal 1 del mismo aeropuerto. Esta vez, la operación se realiza bajo el nombre de Lamap, en conjunto con Hurga Sanitización y Limpieza, asegurándose un contrato millonario que se extiende hasta 2026. La pregunta que muchos se hacen es: ¿cómo es posible que una empresaria con un historial tan cuestionable siga ganando licitaciones públicas de esta magnitud? ¿Qué mecanismos se están utilizando para que, a pesar de las irregularidades, Meza Peña continúe beneficiándose de contratos gubernamentales?

La sombra de José Juan Reyes Domínguez, "El Rey de la Limpieza", se cierne sobre las operaciones de Meza Peña. Conocido por ser el proveedor predilecto de la 4T a través de su empresa Servicios Inmobiliarios Iroa, Reyes Domínguez parece ser una figura clave en este entramado de empresas y licitaciones. La conexión entre ambos plantea interrogantes sobre la posible existencia de una red de influencias que les permite acceder a contratos públicos, a pesar de las acusaciones de sobreprecios y la falta de transparencia en los procesos de licitación.

La historia se repite con Lamap, una empresa con apenas unos años de operación y un historial ya manchado por irregularidades. Su participación en el IMSS Bienestar, bajo la administración de Alejandro Calderón Alipi, terminó en un paro de labores por incumplimiento de pagos, afectando a hospitales y centros de salud en Tlaxcala. A pesar de este antecedente, Lamap, junto a otras empresas del mismo grupo, ha conseguido un contrato para la principal terminal aérea del país. ¿Qué factores permiten que empresas con un historial de incumplimientos sigan siendo consideradas para contratos de esta importancia?

Más allá del caso de Meza Peña, se rumorea que Rogelio Ramírez de la O continúa ejerciendo influencia en las decisiones del gobierno federal, particularmente en la Secretaría de Hacienda, ahora bajo el mando de Edgar Amador. Las especulaciones sobre el próximo relevo en la presidencia de la CNBV apuntan a Francisco Javier Vega, actual vicepresidente de Supervisión de Grupos de Intermediarios Financieros, como el candidato predilecto, mientras que la salida de Jesús de la Fuente parece inminente. Estas hipótesis, de confirmarse, reavivarían el debate sobre la transparencia y la influencia de figuras clave en las decisiones que afectan al sector financiero del país.

Finalmente, la recién creada Secretaría de Ciencia, Humanidades, Tecnología e Innovación, liderada por Rosaura Ruiz Gutiérrez, ha heredado del extinto Conacyt un cúmulo de controversias laborales, juicios y denuncias. La licitación para la defensa legal de la secretaría, adjudicada a Diseño de Estrategias Assessor SC, pone de manifiesto la compleja situación jurídica que enfrenta la nueva institución y los retos que deberá afrontar para resolver los numerosos asuntos pendientes. ¿Será capaz la nueva secretaría de gestionar eficazmente este legado y garantizar la transparencia en sus procesos? El futuro lo dirá.