Nayarit se prepara para una transformación urbana sin precedentes. El nuevo estadio "Nicolás Álvarez Ortega" no solo promete ser un hito deportivo, sino la punta de lanza de un ambicioso proyecto de revitalización social. El gobernador Miguel Ángel Navarro Quintero ha sido enfático: la construcción del estadio no implica sacrificar la riqueza cultural de la zona. Al contrario, se busca una sinergia entre deporte y cultura, dos pilares fundamentales para el desarrollo integral de la sociedad.

Las declaraciones del gobernador disipan las dudas que pudieran existir sobre el futuro de los espacios culturales aledaños al nuevo estadio. "Las aulas, en los dos edificios con mayor cercanía con la avenida Allende, no se van a tocar", afirmó con contundencia, dejando claro que el proyecto arquitectónico se ha diseñado respetando el patrimonio existente. El desplazamiento del proyecto hacia la avenida Insurgentes garantiza la preservación de las estructuras históricas y del Parque de la Dignidad, un pulmón verde vital para la ciudad.

La visión del gobernador va más allá de la simple edificación de un estadio. Se trata de saldar una deuda histórica con la sociedad nayarita, brindando espacios públicos dignos, seguros y funcionales. El terreno donde se construye el estadio, anteriormente un foco de inseguridad y abandono, se convertirá en un motor de desarrollo social, fomentando el deporte, la convivencia familiar y el orgullo de pertenecer a Nayarit. Imaginen un espacio moderno, iluminado, donde familias enteras puedan disfrutar de eventos deportivos y culturales, un lugar que inspire a las nuevas generaciones a practicar deporte y alejarse de las conductas de riesgo.

Esta visión integral se refleja en las obras paralelas que se están llevando a cabo. La rehabilitación del alumbrado en las pistas y rampas del parque La Loma en Tepic es una muestra del compromiso con la recuperación de los espacios recreativos existentes. Además, la próxima construcción de una pista para patinadores en el Recinto Ferial, con una inversión de cinco millones de pesos, no solo brindará a los jóvenes un espacio propio para la práctica de este deporte, sino que también los integrará activamente en el proceso de diseño y aprobación, empoderándolos y haciéndolos partícipes de la transformación de su ciudad.

La apuesta de Nayarit es clara: no se trata de elegir entre cultura o deporte, sino de integrar ambas en un proyecto de desarrollo social que beneficie a todos los nayaritas. El nuevo estadio "Nicolás Álvarez Ortega" no solo será un escenario para el deporte, sino un símbolo de la nueva era de Nayarit: una era de progreso, seguridad y bienestar para todos. Una era donde la cultura y el deporte se dan la mano para construir un futuro más brillante. Este es el legado que el gobernador Navarro Quintero busca dejar para las futuras generaciones: un Nayarit unido, próspero y lleno de oportunidades.