
11 de junio de 2025 a las 15:35
Horror en la primaria: Padres asesinados
El eco de las detonaciones aún resuena en las calles de Mucho Lote, norte de Guayaquil, donde la fría mañana se tiñó de rojo con la sangre de una pareja asesinada a sangre fría frente a una escuela primaria. El horror se desplegó ante los ojos atónitos de padres, maestros y niños que, en el inicio de una jornada escolar que prometía ser normal, se encontraron con una escena digna de una película de terror. Poco después de las 7:00 am, tras dejar a sus dos pequeños hijos en la puerta del colegio, la pareja fue acribillada sin piedad.
La frialdad del crimen hiela la sangre. Según testigos, los asesinos llegaron en una tricimoto. Uno de ellos descendió, arma en mano, y descargó una lluvia de balas sobre las víctimas, mientras su cómplice registraba la macabra escena con su celular. Las imágenes, que rápidamente se viralizaron en redes sociales, muestran la brutalidad del ataque: al menos 20 disparos, incluso cuando los cuerpos yacían inertes en el asfalto. Un acto de barbarie que no solo arrebató la vida a dos personas, sino que robó la tranquilidad de toda una comunidad.
El pánico se apoderó del lugar. Gritos, llantos y la desesperada carrera por buscar refugio fueron la respuesta inmediata al brutal atentado. Padres de familia, aterrados por la posibilidad de una tragedia mayor, acudieron de inmediato a retirar a sus hijos del colegio, obligando a la suspensión de las clases. La conmoción se extendió a otros dos centros educativos cercanos, que también activaron protocolos de seguridad ante la emergencia.
La Policía Nacional acordonó la zona para iniciar las investigaciones. El Subjefe del distrito policial de Pascuales informó que se trabaja en la identificación formal de las víctimas, cuyos cuerpos presentan tatuajes que podrían estar relacionados con grupos delincuenciales. Esta hipótesis abre una línea de investigación hacia un posible ajuste de cuentas, aunque aún no se descartan otras posibilidades.
Mucho Lote, un barrio que alguna vez fue sinónimo de tranquilidad, hoy se encuentra sumido en el miedo y la incertidumbre. Sus habitantes, consternados por el doble crimen, denuncian el incremento de la violencia y la creciente presencia del narcotráfico en la zona. Exigen a las autoridades mayor control y presencia policial para frenar la ola de inseguridad que los azota. La pregunta que todos se hacen es: ¿hasta cuándo? ¿Hasta cuándo seguiremos siendo testigos de esta espiral de violencia que nos arrebata la paz y la esperanza?
Este doble homicidio, perpetrado a plena luz del día y frente a un centro educativo, es un reflejo de la grave crisis de seguridad que atraviesa Guayaquil. Los ataques armados en espacios públicos, incluso cerca de colegios y escuelas, se han vuelto recurrentes, sembrando el terror en la ciudadanía. Es imperativo que las autoridades tomen medidas urgentes y efectivas para combatir la delincuencia y devolver la tranquilidad a las calles. La vida de los guayaquileños no puede seguir siendo moneda de cambio en esta guerra sin cuartel.
El clamor de Mucho Lote es el clamor de todo Guayaquil: ¡Basta ya de violencia! Es hora de unir fuerzas, de exigir respuestas y de construir un futuro donde la vida sea respetada y la paz sea la norma, no la excepción.
Fuente: El Heraldo de México