
12 de junio de 2025 a las 01:30
Educación: Clave para la Paz en México
La apuesta por la paz desde la educación es una constante en el discurso y las acciones del Gobierno de México. No se trata simplemente de una declaración de intenciones, sino de una estrategia integral que se despliega desde las aulas hasta los hogares, tejiendo una red de programas y campañas que buscan abordar las raíces de la violencia. El secretario de Educación Pública, Mario Delgado Carrillo, lo ha dejado claro: la justicia social, la igualdad de oportunidades y la inclusión son los pilares fundamentales sobre los que se construye una cultura de paz. No basta con condenar la violencia, hay que atacar las causas que la generan, esas grietas sociales que alimentan la desesperanza y la marginación.
La Nueva Escuela Mexicana (NEM) se presenta como el escenario ideal para sembrar esta semilla de paz. No se limita a la transmisión de conocimientos, sino que promueve valores esenciales como la tolerancia, el respeto a la diversidad, la equidad de género y la no discriminación. Se busca formar ciudadanos integrales, capaces de dialogar, de resolver conflictos pacíficamente y de construir una sociedad más justa. El deporte, el arte, la cultura y la lectura se convierten en herramientas poderosas para alcanzar este objetivo, complementando la formación académica y ofreciendo espacios de desarrollo personal y social.
La campaña "Aléjate de las drogas. El fentanilo te mata, elige ser feliz" es un ejemplo concreto de cómo el gobierno aborda la problemática de las adicciones, no desde la represión, sino desde la prevención. Las Jornadas Nacionales por la Paz y contra las Adicciones, con su enfoque territorial, buscan llegar a las comunidades más vulnerables, ofreciendo alternativas y generando conciencia sobre los riesgos del consumo de drogas. Se trata de una lucha que se libra en todos los frentes, desde la educación hasta la salud, con la convicción de que la prevención es la mejor arma contra este flagelo.
La Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), como institución educativa de renombre internacional, se suma a este esfuerzo con la estrategia "Cultura de Paz: Un semillero Universitario". El rector Leonardo Lomelí Venegas ha reconocido la importancia de que la universidad asuma un rol activo en la construcción de la paz, generando pensamiento crítico y ofreciendo alternativas ante la creciente ola de violencia que azota al mundo. La firma del Acuerdo por el que se crea el Programa Universitario de Cultura de Paz y Erradicación de las Violencias es un paso firme en esta dirección, un compromiso institucional con la formación de ciudadanos comprometidos con la paz.
La presencia de la Premio Nobel de la Paz, Rigoberta Menchú, en la presentación de esta estrategia en la UNAM, añade un valor simbólico innegable. Su lucha incansable por los derechos humanos y la paz es un ejemplo inspirador para las nuevas generaciones. Su participación refuerza el mensaje de que la paz no es una utopía, sino un objetivo alcanzable a través del esfuerzo conjunto y la perseverancia.
El gobierno de la Presidenta Claudia Sheinbaum Pardo se ha posicionado como un defensor de la paz y de los derechos humanos, tanto a nivel nacional como internacional. Su compromiso con la dignidad humana y la búsqueda de soluciones pacíficas a los conflictos se refleja en las políticas públicas que impulsa. La paz no es solo la ausencia de guerra, es un estado de bienestar social que se construye día a día, con el compromiso de todos los sectores de la sociedad. La educación, como motor de cambio social, juega un papel fundamental en esta tarea. Es la semilla que, cultivada con paciencia y dedicación, florecerá en un futuro más justo y pacífico.
Fuente: El Heraldo de México