
11 de junio de 2025 a las 20:50
Ebrard: T-MEC hasta 2026
Se avecinan tiempos de cambio y renegociación en el horizonte del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC). El Secretario de Economía, Marcelo Ebrard Casaubon, ha anunciado el inicio de las consultas para la revisión del acuerdo a partir de octubre, un proceso que, según la legislación estadounidense, debe concluir el 1 de julio de 2026. Este anuncio no solo marca el inicio de un periodo crucial para la economía de Norteamérica, sino que también abre un abanico de oportunidades y desafíos para los tres países involucrados.
La revisión del T-MEC, lejos de ser un mero trámite burocrático, representa una oportunidad para fortalecer la integración económica regional y adaptarla a las nuevas realidades globales. El mundo ha cambiado significativamente desde la entrada en vigor del tratado, con la pandemia, las tensiones geopolíticas y las disrupciones en las cadenas de suministro dejando una huella profunda en el comercio internacional. En este contexto, la revisión del T-MEC se convierte en una plataforma para modernizar el acuerdo y asegurar que siga siendo un motor de crecimiento y prosperidad para las tres naciones.
Ebrard Casaubon ha enfatizado la importancia de que México se mantenga en una posición ventajosa en relación con otros países en términos de aranceles. Este objetivo, si bien ambicioso, es fundamental para proteger la competitividad de la industria mexicana y asegurar el acceso preferencial a los mercados de Estados Unidos y Canadá. La estrategia del gobierno mexicano, según lo expresado por el Secretario, consiste en realizar una evaluación exhaustiva del tratado y formular propuestas que beneficien a la economía nacional. Para ello, se requiere recopilar información clave, como la futura estructura arancelaria de Estados Unidos con otros países, un factor determinante para definir la postura mexicana en las negociaciones.
La incertidumbre en torno a los aranceles que Estados Unidos impondrá a otros países añade un componente de complejidad a la revisión del T-MEC. Esta variable, aún desconocida, influirá directamente en la estrategia negociadora de México y en la búsqueda de un equilibrio que proteja sus intereses. El compromiso del gobierno mexicano de obtener las mejores condiciones posibles para el país en el marco del nuevo acuerdo refleja la importancia estratégica del T-MEC para la economía nacional.
En los próximos meses, se espera una intensa actividad diplomática y técnica en torno a la revisión del T-MEC. Las consultas, que involucrarán a representantes de los tres países, serán el escenario para debatir y negociar los diferentes aspectos del acuerdo, desde las reglas de origen hasta la protección de las inversiones. El resultado de este proceso tendrá un impacto significativo en el futuro del comercio y la inversión en Norteamérica, y su éxito dependerá de la capacidad de los tres países para encontrar soluciones que beneficien a todos.
Más allá de los aspectos técnicos y legales de la revisión, es crucial destacar la importancia de la transparencia y la participación ciudadana en este proceso. La sociedad civil, las empresas y los diferentes sectores productivos deben tener la oportunidad de expresar sus opiniones y contribuir al debate sobre el futuro del T-MEC. Un acuerdo que responda a las necesidades y aspiraciones de la población de los tres países será más sólido y legítimo, y contribuirá a un futuro más próspero para toda la región. El camino hacia la modernización del T-MEC apenas comienza, y el compromiso de todos los actores involucrados será fundamental para alcanzar un resultado exitoso.
Fuente: El Heraldo de México