El romance entre el chef Poncho Cadena y la cantante Litzy ha dado un giro inesperado con la reciente propuesta de matrimonio. Mientras la feliz pareja celebra su compromiso, la exesposa del chef, Marcela Morales, ha expresado su preocupación por la herencia de sus hijos, manifestando su negativa a ceder la totalidad del patrimonio a la nueva prometida. Este conflicto familiar ha tomado un nuevo rumbo con el inicio oficial del proceso de divorcio entre Cadena y Morales.

Según fuentes cercanas al chef, Cadena viajó recientemente a Guadalajara, no solo para celebrar la graduación de uno de sus hijos, un evento que demuestra su compromiso inquebrantable con su familia a pesar de la separación, sino también para dar inicio formal a los trámites de divorcio. Este viaje, cargado de simbolismo, representa el cierre de un capítulo y el comienzo de otro, con la sombra del proceso legal planeando sobre la celebración familiar. El informante destaca la dedicación de Cadena como padre, afirmando que, a pesar de su apretada agenda, siempre ha estado presente en la vida de sus hijos.

La disolución del matrimonio implica, inevitablemente, la compleja tarea de la separación de bienes. Se espera que este proceso sea meticuloso y exhaustivo, con Marcela Morales solicitando una revisión detallada del patrimonio del chef para garantizar una distribución justa y equitativa. La fuente cercana al chef reveló que Cadena, en un gesto que parece buscar la conciliación y agilizar el proceso, ha expresado su disposición a ceder la totalidad de sus bienes a su exesposa, incluso ofreciendo cambiar la titularidad de todas sus propiedades a nombre de Morales. Sin embargo, ella insiste en que el procedimiento se lleve a cabo con total apego a la legalidad, lo que podría prolongar el proceso considerablemente.

Esta insistencia en la legalidad ha generado especulaciones. Algunos allegados al chef se preguntan si la postura de Marcela Morales responde a un genuino deseo de justicia o a una estrategia para dilatar el proceso y, posiblemente, interferir con los planes de boda de Cadena y Litzy. La fuente consultada por TV Notas plantea la inquietud: "¿Realmente lo hace para evitar problemas futuros o busca alargar el proceso para que no coincida con la boda de Litzy?".

Independientemente de las motivaciones de su exesposa, Poncho Cadena parece decidido a seguir adelante con su nueva vida. El reconocido chef está dispuesto a arriesgarlo todo por amor, dejando atrás su pasado para construir un futuro junto a Litzy. Con la confianza que le otorga su talento culinario, Cadena se muestra seguro de poder reconstruir su imperio gastronómico si fuera necesario. La fuente afirma que el chef "sabe que tiene la magia en las manos" para volver a levantar un restaurante, demostrando que su pasión por la cocina es tan fuerte como su amor por Litzy. En esta encrucijada de su vida, Poncho Cadena apuesta por el amor, dispuesto a pagar el precio que sea necesario para alcanzar su felicidad y la de su nueva pareja. El futuro dirá si esta arriesgada apuesta le traerá la tranquilidad y el amor que busca.