
10 de junio de 2025 a las 15:50
¡Pareja sale volando del Canguro!
La sombra de la inseguridad vuelve a cernirse sobre la Expo Guadalupe. El pasado domingo, la alegría y la música festiva se vieron interrumpidas por un estremecedor accidente en el juego mecánico "Canguro". Dos personas, Patricia Pérez de 29 años y Julio (cuya edad aún no ha sido revelada), se precipitaron al vacío tras la aparente ruptura de una bisagra en uno de los asientos. La escena, digna de una película de terror, dejó a los presentes conmocionados y abrió de nuevo el debate sobre la seguridad en los parques de atracciones.
Aunque la feria ha emitido un comunicado asegurando la pronta atención médica de las víctimas y la cobertura de los gastos hospitalarios, el incidente deja un sabor amargo y muchas preguntas sin respuesta. ¿Fue realmente una falla mecánica la causante del accidente? ¿Se realizaron las revisiones de seguridad pertinentes antes de la apertura de la feria? La promesa de una inspección exhaustiva de todos los juegos por parte de Protección Civil llega, lamentablemente, después del incidente. ¿Será suficiente para recuperar la confianza del público?
Las lesiones sufridas por Patricia y Julio, aunque no ponen en peligro su vida, son un crudo recordatorio del riesgo que implica subirse a estas atracciones. Un tobillo y nudillos lesionados para Julio, golpes en el maxilar y el cráneo para Patricia, son las secuelas físicas de un momento de esparcimiento convertido en pesadilla. Más allá de las heridas físicas, ¿cuál será el impacto psicológico de esta experiencia traumática?
La inquietud se acrecienta al recordar las denuncias previas sobre la seguridad en la Expo Guadalupe. Un video en TikTok, publicado el 29 de mayo, mostraba un tornillo flojo en uno de los juegos. ¿Fue una advertencia ignorada? Este incidente se suma a una lista preocupante de accidentes en la feria, como la caída del "Teleférico" en octubre de 2021 y la falla eléctrica del "Casino" en junio de 2024. ¿Estamos ante un patrón de negligencia o simplemente una desafortunada coincidencia?
La clausura del juego "Canguro" y el acordonamiento de la zona son medidas necesarias, pero insuficientes. Es imperativo que las autoridades realicen una investigación exhaustiva para determinar las causas del accidente y deslindar responsabilidades. La seguridad de los asistentes debe ser la prioridad absoluta. No podemos permitir que la diversión se convierta en tragedia. La Expo Guadalupe, y todas las ferias del país, deben garantizar que sus atracciones sean seguras y que se cumplan con los protocolos de mantenimiento y revisión. La vida de las personas no puede depender de un tornillo o una bisagra. Es tiempo de exigir mayor rigor y responsabilidad para que la alegría de la feria no se tiña de sangre.
Más allá de las declaraciones oficiales y los comunicados, es fundamental escuchar las voces de las víctimas y sus familias. ¿Qué medidas esperan que se tomen para evitar futuros accidentes? ¿Qué tipo de apoyo psicológico y emocional se les está brindando? La empatía y la solidaridad son cruciales en estos momentos.
La Expo Guadalupe tiene ahora un gran reto por delante: recuperar la confianza del público. No bastará con simples promesas. Se necesitan acciones concretas y transparentes que demuestren un compromiso real con la seguridad. El futuro de la feria, y de la industria del entretenimiento en general, depende de ello. La diversión no puede ser sinónimo de riesgo.
Fuente: El Heraldo de México