
9 de junio de 2025 a las 18:55
Oaxaca: 800 mil alumnos vuelven a las aulas
Tras semanas de intensa movilización en la capital del país, el magisterio oaxaqueño, representado por la Sección 22 de la CNTE, ha decidido retomar sus labores en las aulas. Este retorno, después de 24 días de paro, no significa una claudicación en sus demandas, sino una reorganización estratégica para fortalecer su lucha por la derogación de la ley del ISSSTE del 2007. El regreso a clases, programado para el 9 de junio, marca el fin de una primera etapa en la Jornada Nacional de Lucha, un periodo que, según el comunicado emitido por la CNTE, ha demostrado la firmeza y convicción del Movimiento Democrático de los Trabajadores de la Educación de Oaxaca (MDTEO) y de todos los contingentes participantes.
La decisión, tomada en conjunto con otros estados que se unieron a las movilizaciones en la Ciudad de México, busca consolidar una estrategia más contundente para las próximas acciones. Se espera que esta pausa permita una mayor participación y la planificación de actividades que generen resultados más significativos en la búsqueda de la justicia que reclaman. Más allá de "limosnas", los docentes exigen respeto a sus derechos y una revisión profunda de la ley que consideran lesiva.
Este retorno a las aulas implica la reanudación de los programas y contenidos educativos en cada una de las escuelas de Oaxaca, impactando a más de 800 mil alumnos de educación básica. La prioridad, a pesar de la lucha sindical, sigue siendo la educación de los niños y niñas oaxaqueños, y este regreso permitirá preparar de manera adecuada el cierre del ciclo escolar 2023-2024.
En comunidades como San Mateo del Mar, la tensión generada por el paro magisterial comienza a disiparse. El llamado previo al regreso a clases, realizado días antes en esta comunidad ikoots, anticipó la decisión tomada a nivel estatal y refleja la preocupación por minimizar el impacto de la movilización en la educación de los niños.
La Sección 22, en su comunicado, reitera su compromiso con la educación pública y dirige un mensaje de tranquilidad a padres de familia, tutores y autoridades, asegurando que el regreso a las actividades educativas es definitivo, al menos por ahora. Este paréntesis en la lucha no representa un abandono de sus reivindicaciones, sino una pausa estratégica para reagrupar fuerzas y planificar nuevas acciones que permitan alcanzar sus objetivos. El magisterio oaxaqueño deja claro que la lucha continúa y que seguirán defendiendo sus derechos con la misma firmeza y convicción que han demostrado hasta ahora. Se espera que las próximas movilizaciones sean aún más contundentes y logren generar la presión necesaria para alcanzar la derogación de la ley del ISSSTE del 2007.
Fuente: El Heraldo de México