
8 de junio de 2025 a las 04:10
México y EU unidos contra el fentanilo
La sombra del fentanilo se extiende como una amenaza silenciosa, poniendo en peligro la vida de jóvenes a ambos lados de la frontera. En esta lucha crucial, la colaboración entre Estados Unidos y México se alza como un faro de esperanza. El embajador Ronald Johnson ha resaltado la sinergia entre los presidentes Donald Trump y Claudia Sheinbaum, una alianza forjada en el acero de la determinación para frenar el flujo letal de esta droga y sus precursores. No se trata solo de decomisos y operativos, sino de una estrategia integral que busca proteger la salud y la seguridad de la juventud, un tesoro invaluable que debemos resguardar a toda costa.
Imaginen un futuro donde nuestros hijos puedan crecer libres del espectro del fentanilo, donde la promesa de un mañana brillante no se vea opacada por la adicción y la desesperanza. Este es el futuro que construimos juntos, ladrillo a ladrillo, con cada esfuerzo coordinado, con cada incautación, con cada programa de prevención. La colaboración binacional no es una opción, es una necesidad imperante. Es la llave para cerrar la puerta al sufrimiento y abrir la puerta a un futuro más seguro y saludable para todos.
El problema del fentanilo es complejo, con raíces profundas en las redes criminales que operan con impunidad. No basta con interceptar cargamentos, debemos desmantelar las estructuras que permiten su producción y distribución. Aquí, nuevamente, la colaboración entre ambos países se vuelve esencial. El intercambio de información, la capacitación conjunta de las fuerzas del orden y la implementación de estrategias conjuntas son armas poderosas en esta batalla.
El compromiso de los presidentes Trump y Sheinbaum es un testimonio de la seriedad con la que ambos gobiernos se toman esta amenaza. No se trata de un problema aislado, sino de una cuestión de seguridad nacional que demanda una respuesta contundente y coordinada. La lucha contra el fentanilo es una carrera contra el tiempo, una carrera que solo podemos ganar si corremos juntos.
Y la lucha no se limita al fentanilo. El tráfico de armas hacia el sur es otra herida abierta que alimenta la violencia y fortalece a los cárteles. Nuevamente, la colaboración entre Estados Unidos y México es fundamental para cortar de raíz este flujo letal. Desmantelar las redes criminales, identificar a los responsables y llevarlos ante la justicia son pasos cruciales para construir un futuro más seguro a ambos lados de la frontera.
El embajador Johnson ha enfatizado la importancia de trabajar juntos para fortalecer la seguridad de ambos países. Esta alianza no es simplemente un acuerdo político, es una alianza estratégica basada en la comprensión de que la seguridad de uno está intrínsecamente ligada a la seguridad del otro. Juntos, somos más fuertes. Juntos, podemos construir un futuro donde la paz y la seguridad sean la norma, no la excepción.
La colaboración binacional en materia de seguridad no es un concepto abstracto, sino una realidad tangible que se traduce en acciones concretas. Es el intercambio de información de inteligencia, es la capacitación conjunta de las fuerzas del orden, es la implementación de estrategias coordinadas para combatir el crimen organizado. Es, en definitiva, una inversión en un futuro más seguro para todos.
Fuente: El Heraldo de México