La noche del 6 de junio quedará grabada en la memoria de los clientes del Sam's Club La Noria en Puebla, tras un violento asalto que ha conmocionado a la ciudad. Alrededor de las 20:00 horas, la aparente tranquilidad del supermercado se vio interrumpida por la irrupción de al menos seis individuos. Lejos de la imagen estereotipada del delincuente enmascarado, estos sujetos vestían ropa casual: pantalones de mezclilla, sudaderas de diversos colores, algunos con gorras, otros con capuchas. Una apariencia casi cotidiana que contrastaba brutalmente con la amenaza que representaban.

Las imágenes captadas por los teléfonos celulares de algunos clientes presentes, muestran escenas de auténtico terror. Personas tiradas en el suelo, buscando refugio entre los anaqueles, el pánico reflejado en sus rostros. Mientras unos intentaban protegerse, otros grababan, documentando la pesadilla que se desarrollaba ante sus ojos. Uno de los videos muestra a una persona boca abajo, inmóvil, mientras los asaltantes se retiran del lugar. La tensión y el miedo son palpables en cada fotograma.

El objetivo de los delincuentes, según reportes preliminares, era la sección de telefonía. Con una violencia que estremece, rompieron las vitrinas y sustrajeron aproximadamente 90 dispositivos, entre celulares y laptops. El botín fue rápidamente guardado en mochilas, y los asaltantes huyeron en una camioneta negra, dejando tras de sí un escenario de caos y consternación.

Testigos presenciales describieron la rapidez y coordinación con la que operaron los asaltantes. Mencionaron detalles de su vestimenta: cuatro con ropa oscura y tenis blancos, dos con capuchas, dos con gorras, uno con chamarra roja y otro con sudadera gris. Detalles que, aunque parezcan insignificantes, pueden ser cruciales para la investigación. Actuaron como un equipo bien engrasado, completando el robo en cuestión de minutos.

La Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) confirmó el incidente y aseguró que se ha desplegado un operativo de búsqueda en la zona, con la participación de los tres niveles de gobierno. La camioneta utilizada en la huida ha sido boletinada y se está rastreando su recorrido a través de las cámaras de seguridad de la ciudad. Hasta el momento no se han reportado detenciones.

Este hecho violento ha generado una ola de indignación y preocupación en la comunidad poblana. La aparente facilidad con la que los delincuentes perpetraron el robo y la vulnerabilidad de los clientes dentro del establecimiento son temas que se discuten acaloradamente en redes sociales. La pregunta que muchos se hacen es: ¿qué medidas de seguridad se implementarán para evitar que este tipo de incidentes se repitan? Mientras tanto, la incertidumbre y el miedo persisten entre quienes presenciaron el asalto y la población en general.

La SSC ha reiterado su compromiso con la seguridad de los ciudadanos y ha instado a la población a colaborar con cualquier información que pueda ayudar a la captura de los responsables. La investigación continúa, y la ciudad espera que se haga justicia y se refuercen las medidas de seguridad para garantizar la tranquilidad de sus habitantes. El asalto al Sam's Club La Noria no solo es un robo, es un recordatorio de la fragilidad de la seguridad y la necesidad de una respuesta contundente por parte de las autoridades.