Logo
NOTICIAS
play VIDEOS

Inicio > Noticias > Clima

8 de junio de 2025 a las 20:40

Alerta Verde en Guerrero por Bárbara

La tranquilidad de un domingo soleado se ve interrumpida por la sombra de Bárbara, la tormenta tropical que se gesta frente a las costas de Guerrero. Aunque la gobernadora Evelyn Salgado Pineda ha informado que la entidad se encuentra en alerta verde, un estado de relativa calma, la amenaza latente de fuertes lluvias y vientos nos recuerda la importancia de la prevención. La naturaleza, en su impredecible danza, nos obliga a estar preparados.

Zihuatanejo, ese paraíso de playas doradas y aguas cristalinas, se encuentra a 290 kilómetros del ojo de la tormenta. Imaginen la fuerza de la naturaleza, capaz de gestar un fenómeno de tal magnitud en las profundidades del océano. Las autoridades, con la mirada puesta en el cielo y los instrumentos de medición en mano, siguen de cerca la evolución de Bárbara, un nombre que evoca la fuerza y la imprevisibilidad de los elementos.

La gobernadora Salgado, con serenidad y firmeza, ha comunicado que si bien no se espera que Bárbara toque tierra en Guerrero, la influencia de la tormenta se sentirá con intensidad. Lluvias intensas, vientos que azotan con fuerza y un oleaje elevado pintan un escenario que exige precaución. La Costa Grande, ese territorio donde la sierra se funde con el mar, se prepara para recibir el impacto de las precipitaciones. El resto del estado, en alerta, se mantiene expectante.

El lunes, un día que para muchos significa el regreso a la rutina, podría marcar un punto de inflexión en la trayectoria de Bárbara. Las previsiones indican que podría alcanzar la categoría de huracán. Una transformación que, aunque se espera que ocurra lejos de las costas guerrerenses, nos recuerda el poder de la naturaleza. Colima y Michoacán, estados vecinos, se encuentran también en la trayectoria prevista. La solidaridad y la cooperación entre las entidades federativas serán cruciales en las próximas horas.

La Secretaría de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil Guerrero, en coordinación con el Gobierno del Estado, ha desplegado un plan de acción para hacer frente a la contingencia. La prevención, ese escudo que nos protege de los embates de la naturaleza, se convierte en la principal herramienta. Brigadas de protección civil, personal de emergencia y voluntarios se preparan para actuar con prontitud y eficiencia ante cualquier eventualidad.

Acapulco, la joya del Pacífico, ese destino turístico que evoca la alegría y el descanso, se encuentra en fase amarilla de vigilancia. Las autoridades municipales, conscientes del riesgo que representan las lluvias intensas y las rachas de viento de hasta 50 kilómetros por hora, han instado a la población a tomar precauciones. La belleza de la bahía, enmarcada por el imponente paisaje de la sierra, contrasta con la amenaza latente de la tormenta.

Este es un momento para recordar la importancia de la preparación. Revisar las reservas de agua y alimentos, asegurar los objetos que puedan salir volando por la fuerza del viento, tener a la mano un botiquín de primeros auxilios y mantenerse informado a través de los canales oficiales son medidas que pueden marcar la diferencia entre la seguridad y el riesgo. La prevención, más que una obligación, es un acto de responsabilidad individual y colectiva. En momentos como estos, la unidad y la solidaridad son fundamentales para afrontar los desafíos que nos presenta la naturaleza.

Fuente: El Heraldo de México