
6 de junio de 2025 a las 21:30
Culiacán: Ejército recupera arsenal y vehículos
La tensión se palpa en el aire de Sinaloa. Los ecos de las sirenas y el zumbido de los helicópteros se han convertido en una melodía inquietante en los últimos días, recordatorio constante de la lucha incesante contra el crimen organizado. Concordia, Escuinapa de Hidalgo y Culiacán, tres municipios unidos por la sombra de la violencia, han sido escenario de una serie de operativos llevados a cabo por el Ejército Mexicano y la Guardia Nacional, que han arrojado resultados significativos en el combate contra los grupos armados que operan en la región.
El primer golpe se asestó en el corazón rural de Sinaloa. En los recónditos poblados de Loberas, en Concordia; Imala, en Culiacán; y Chametla, en Escuinapa, el personal castrense, desplegado estratégicamente, logró incautar un arsenal que incluía tres armas largas, cargadores y la friolera de 627 cartuchos útiles. Imaginen la potencia de fuego que representaba este arsenal en manos equivocadas. Estas acciones, fruto de un intenso trabajo de inteligencia y patrullaje preventivo, demuestran el compromiso de las fuerzas armadas por desarticular las células delictivas que se ocultan en las zonas rurales, aprovechando la complejidad del terreno.
La lucha no se limita al campo. En el corazón urbano de Culiacán, en la colonia Guadalupe Victoria, la Guardia Nacional respondió a un llamado de emergencia que destapó otra pieza del rompecabezas criminal. Un arma larga, cargadores, cartuchos y cuatro vehículos abandonados en plena calle, testigos mudos de una huida precipitada. La escena evoca la imagen de un grupo armado sorprendido, obligado a abandonar su equipo para escapar de las garras de la justicia. ¿Quiénes eran? ¿Hacia dónde huyeron? Las preguntas flotan en el aire mientras las autoridades competentes inician las investigaciones.
Horas después, el Ejército Mexicano continuó la ofensiva en la colonia Campesina El Barrio, también en Culiacán. En un operativo quirúrgico, dos hombres fueron detenidos en posesión de un verdadero arsenal: cuatro armas largas, dos armas cortas, cargadores, una cantidad aún no especificada de cartuchos y un vehículo. Este golpe directo al crimen organizado representa una victoria significativa en la batalla por la seguridad de Culiacán. ¿Qué papel jugaban estos individuos en la estructura criminal? ¿A qué grupo pertenecían? Las investigaciones lo dirán.
Todos los objetos asegurados, desde las armas hasta los vehículos, han sido puestos a disposición de las autoridades correspondientes, quienes se encargarán de analizar cada detalle, cada pista, para desentrañar la compleja red criminal que opera en la región. Los dos detenidos también se encuentran bajo custodia, a la espera de ser procesados conforme a la ley.
Estos operativos, lejos de ser hechos aislados, forman parte de una estrategia integral para restablecer el orden y la paz en Sinaloa. Una estrategia que busca no solo desarticular a los grupos criminales, sino también debilitar su capacidad operativa, cortando sus líneas de suministro y desmantelando sus redes de apoyo. El mensaje es claro: las fuerzas armadas no descansarán hasta que la tranquilidad regrese a las calles de Sinaloa. La lucha es larga y compleja, pero la determinación es inquebrantable. El futuro de Sinaloa se escribe con cada operativo, con cada arma incautada, con cada delincuente detenido. La esperanza de un futuro mejor se mantiene viva.
Fuente: El Heraldo de México