La temporada de huracanes en el Pacífico se muestra activa y expectante ante la posible formación del Huracán Cosme. El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) mantiene una estrecha vigilancia sobre una zona de baja presión con un 70% de probabilidad de desarrollo ciclónico en los próximos siete días. De materializarse, este fenómeno se convertiría en el tercer huracán de la temporada 2025, siguiendo los pasos de Alvin, que alcanzó la categoría de tormenta tropical, y Bárbara, que actualmente presenta un 80% de potencial ciclónico.

Esta situación nos recuerda la impredecibilidad de la naturaleza y la importancia de la preparación. Si bien aún es prematuro determinar la trayectoria exacta de Cosme, la experiencia nos ha enseñado que la prevención es clave. El antecedente del Huracán Cosme de 1989, que sorprendió con su inusual recorrido cerca del Valle de México, afectando a la Ciudad de México y el Estado de México, subraya la necesidad de estar informados y tomar precauciones.

Baja California se encuentra en la zona de influencia de esta baja presión y sus habitantes deben comenzar a prepararse. ¿Qué significa esto en la práctica? Revisar los planes familiares de emergencia, asegurar los hogares, abastecerse de víveres no perecederos y agua potable, así como mantenerse al tanto de los comunicados oficiales del SMN. La información oportuna puede marcar la diferencia.

La formación de Cosme pone de manifiesto la importancia del monitoreo constante de las condiciones meteorológicas. El SMN, a través de sus canales de comunicación, proporciona actualizaciones periódicas sobre la evolución de este fenómeno. Mantenerse informado es el primer paso para protegernos a nosotros mismos y a nuestras familias. Las redes sociales del SMN son una herramienta fundamental para acceder a la información más reciente y a las recomendaciones de las autoridades.

Es fundamental recordar que la prevención no es sinónimo de alarma, sino de responsabilidad. Estar preparados nos permite afrontar cualquier eventualidad con mayor tranquilidad y eficacia. La solidaridad y la cooperación entre la comunidad también juegan un papel crucial en momentos de contingencia. Apoyarnos mutuamente y seguir las indicaciones de las autoridades son acciones fundamentales para minimizar los riesgos.

Ante la posibilidad de la llegada de Cosme, la prudencia y la preparación son nuestras mejores aliadas. Sigamos atentos a la información oficial y actuemos con responsabilidad para salvaguardar nuestro bienestar y el de nuestros seres queridos. La naturaleza es poderosa, pero la información y la prevención son nuestras herramientas para enfrentarla.