
3 de junio de 2025 a las 23:05
Oaxaca: 2000 puestos en juego
Oaxaca se prepara para un 2027 electoral sin precedentes. La concurrencia de las elecciones municipales, estatales y federales, incluyendo la inédita elección popular de jueces y magistrados, promete una jornada cívica compleja y de gran envergadura. El reto logístico es considerable: 2,300 candidaturas en juego, la necesidad de instalar un número suficiente de casillas y la coordinación entre el IEEPCO, el Poder Ejecutivo, Legislativo y Judicial, implican una planificación minuciosa para garantizar la transparencia y la eficiencia del proceso.
La decisión de unificar las elecciones, impulsada por la reforma Judicial Federal, busca optimizar recursos y evitar gastos innecesarios. Sin embargo, la magnitud de la tarea presenta desafíos significativos. La experiencia de la elección judicial del 1 de junio servirá como valioso antecedente para identificar áreas de mejora y ajustar el marco normativo. Este aprendizaje continuo, sumado a los reportes del Instituto Nacional Electoral (INE), permitirá perfeccionar el sistema y adaptarlo a las particularidades de la elección de 2027.
La elección popular de jueces y magistrados, un cambio trascendental en el sistema judicial, implica la renovación de una parte importante del Poder Judicial de Oaxaca. Al menos 180 jueces y 16 magistrados del Tribunal Superior de Justicia del Estado estarán en la boleta electoral, sometiendo su desempeño al escrutinio ciudadano. Este nuevo mecanismo de selección busca fortalecer la independencia judicial y acercar la justicia a la población.
Mientras tanto, la presidenta del INE, Guadalupe Taddei Zavala, descarta cualquier escenario de crisis postelectoral. La ausencia de incidentes graves, la fluidez en el conteo de votos y la tranquilidad en las calles, son indicadores positivos que refuerzan la confianza en el sistema electoral. Taddei Zavala se compromete a mantener informada a la ciudadanía, ofreciendo datos veraces y oportunos sobre el avance del proceso, garantizando así la transparencia y la legitimidad de los resultados.
La convergencia de estos procesos electorales en 2027, sin duda, marcará un hito en la historia política de Oaxaca. La participación ciudadana será crucial para el éxito de esta jornada democrática, tanto en las urnas como en la vigilancia del proceso. El futuro político del estado se definirá en ese año, y la sociedad oaxaqueña tendrá la responsabilidad de ejercer su derecho al voto de manera informada y responsable. La consolidación de un sistema judicial más democrático y la elección de las autoridades que guiarán los destinos de los 152 municipios y del Congreso Estatal, dependerán de la activa participación de todos los oaxaqueños. El 2027 se presenta como un año crucial para el estado, un año en el que la democracia se pondrá a prueba y en el que la ciudadanía tendrá la última palabra.
Fuente: El Heraldo de México