
3 de junio de 2025 a las 23:40
¡Clases de vuelta en Oaxaca!
La sombra de las administraciones pasadas se cierne sobre el presente de la educación en Oaxaca. El Gobernador Salomón Jara Cruz, en un diálogo franco con el magisterio, ha puesto sobre la mesa la compleja realidad financiera heredada del PRI y el PAN, una herencia que condiciona la respuesta a las demandas del sector. "No somos lo mismo", insiste Jara Cruz, marcando una distancia clara con las prácticas de gobiernos anteriores, evocando episodios como las reuniones simuladas del ex secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, durante el sexenio de Peña Nieto, donde las promesas quedaron en el aire. Un pasado que aún resuena en las consignas de los mentores, que ven en las figuras de López Obrador y Claudia Sheinbaum una continuidad con las políticas de antaño.
La acusación de "delincuentes" lanzada por Claudio X. González, fundador de Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad, se suma a este complejo escenario, un señalamiento que Jara Cruz rechaza con firmeza, reiterando la apertura al diálogo y la búsqueda de soluciones. A pesar de la tensión, el gobierno estatal ha presentado un documento con compromisos concretos, destacando el aumento de bases para atender la demanda de profesores en diversas regiones y comunidades, una necesidad acuciante para garantizar la calidad educativa en todo el estado. Además, se ha anunciado una importante inversión de 800 millones de pesos para cubrir esta y otras peticiones del magisterio, una cifra que, si bien representa un esfuerzo considerable, refleja las limitaciones impuestas por la situación financiera actual.
La respuesta del magisterio, sin embargo, ha sido la ausencia en la reunión programada para este martes, una decisión que pospone el diálogo y mantiene la incertidumbre. Si bien Jara Cruz confía en el pronto regreso a las aulas, la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación ha optado por aplazar el encuentro, dejando en el aire la posibilidad de un acuerdo. Este compás de espera abre interrogantes sobre el futuro de las negociaciones. ¿Se logrará un punto de encuentro que satisfaga las demandas del magisterio sin comprometer la estabilidad financiera del estado? ¿Podrá la administración de Jara Cruz superar la sombra del pasado y construir una nueva relación con el sector educativo?
La compleja situación financiera heredada, las acusaciones y señalamientos del pasado, la necesidad de atender las demandas del magisterio y la búsqueda de un diálogo constructivo se entrelazan en un panorama que exige soluciones creativas y una voluntad real de entendimiento. El futuro de la educación en Oaxaca depende de la capacidad de las partes para superar las diferencias y trabajar juntas en la construcción de un sistema educativo sólido y equitativo. El tiempo dirá si este impasse se convierte en una oportunidad para el cambio o en un nuevo capítulo de desencuentros. Mientras tanto, la comunidad educativa y la sociedad oaxaqueña en su conjunto esperan con atención el desenlace de esta compleja situación.
Fuente: El Heraldo de México