
3 de junio de 2025 a las 19:50
¡Capibara fugitivo encontrado!
La increíble odisea de Doubao, el capibara fugitivo, ha llegado a su fin. Tras dos meses de intensa búsqueda, el escurridizo roedor ha sido finalmente capturado, poniendo fin a una historia que ha cautivado a China y al mundo entero. Su escape, a principios de abril, se convirtió en un fenómeno viral, impulsado por la creciente popularidad de estos adorables mamíferos. Recordemos que Doubao no estaba solo en su aventura. Sus compañeros de fuga, Bazong y Duoduo, fueron recapturados con relativa facilidad, el primero descansando plácidamente junto a un lago tras atravesar una valla, y el segundo, quizás buscando refugio, en un contenedor de basura. Sin embargo, Doubao, con una astucia sorprendente para un roedor de su tamaño, logró evadir la captura durante semanas, convirtiéndose en un símbolo de resistencia y libertad para muchos.
La noticia de su captura ha generado un suspiro de alivio colectivo. Las autoridades del zoológico han confirmado que Doubao se encuentra en perfecto estado de salud, e incluso ha ganado peso durante su tiempo en libertad. Imaginen las historias que podría contar este pequeño aventurero sobre sus peripecias en el mundo exterior. Quizás se deleitó con los exuberantes pastos del parque, o tal vez se hizo amigo de otros animales. Lo cierto es que su historia ha despertado la curiosidad y la simpatía de miles de personas, que seguían con atención cada nueva pista sobre su paradero.
El nombre de Doubao, que significa "dulce de frijoles" en chino, se ha vuelto sinónimo de aventura y perseverancia. Este macho, del tamaño de un niño de seis años, ha demostrado que incluso los animales más pequeños pueden tener un gran impacto en el corazón de las personas. Su historia nos recuerda la importancia de la libertad y la conexión con la naturaleza, y nos invita a reflexionar sobre nuestra relación con el mundo animal.
Los capibaras, o Hydrochoerus hydrochaeris, como se les conoce científicamente, son los roedores más grandes del mundo. Originarios de Sudamérica, estos animales semiacuáticos se desenvuelven con igual destreza tanto en tierra como en agua, dividiendo su tiempo entre ambas para alimentarse de plantas acuáticas y mantenerse frescos. Su hábitat natural se extiende a lo largo de varios países sudamericanos, desde las vastas llanuras de Argentina hasta las exuberantes selvas de Venezuela. Su adaptación al entorno acuático les permite disfrutar de los ríos, lagos y pantanos, donde pueden nadar y sumergirse con gran habilidad.
La popularidad de Doubao ha puesto en el foco de atención a estos fascinantes animales, generando un interés renovado por su conservación y su bienestar. Su historia nos recuerda que cada criatura, por pequeña que sea, tiene un valor intrínseco y merece nuestro respeto y protección. Esperemos que la aventura de Doubao inspire a más personas a aprender sobre la maravillosa diversidad del reino animal y a contribuir a su preservación. ¿Quién sabe qué otras historias increíbles nos esperan en el mundo natural?
Fuente: El Heraldo de México