
2 de junio de 2025 a las 22:05
Maestros de Oaxaca: ¡Vuelvan a Clases!
La zozobra crece en la Sierra Norte de Oaxaca. 26 municipios, 70 localidades, un clamor unánime: el regreso a clases. La Unión Liberal de Ayuntamientos (ULADI), representando a la Asociación Regional de Municipios Indígenas del Distrito de Ixtlán de Juárez, ha alzado la voz, dirigiendo un oficio a la Secretaria General de la Sección 22 de la CNTE, la Profra. Yenny Araceli Pérez Martínez. La misiva, cargada de urgencia, expresa la profunda preocupación por el futuro educativo de los niños y niñas de la región, un futuro que se ve amenazado por la prolongada ausencia de los docentes en las aulas.
En las comunidades indígenas, la educación es la llave para un futuro mejor, una herramienta para romper el círculo de la pobreza y la marginación. Cada día sin clases representa una oportunidad perdida, un retroceso en el camino hacia el desarrollo. Las necesidades en estas zonas son apremiantes y la educación es el pilar fundamental para superarlas. Por ello, la ULADI hace un llamado a la sensibilidad y responsabilidad de la Sección 22, instándolos a priorizar el bienestar de los alumnos y a reanudar las clases de manera inmediata.
El Presidente Municipal de San Jerónimo Tlacochahuaya, se suma a esta petición con la voz firme de quien representa a un pueblo angustiado. La inconformidad de la población es palpable, el derecho a la educación de sus hijos e hijas está siendo vulnerado. El retraso en la formación educativa es una herida que se profundiza con cada día que pasa, un obstáculo en el camino hacia un futuro prometedor. El llamado del alcalde es claro: el regreso a clases debe ser una realidad a partir del lunes 2 de junio.
Ante la incertidumbre y la falta de respuesta, el alcalde de San Jerónimo Tlacochahuaya ha planteado una medida drástica: la posible incorporación de maestros pertenecientes a otras organizaciones sindicales, como la sección 59. Esta decisión, aunque difícil, refleja la determinación de la comunidad de garantizar la continuidad educativa de sus niños y niñas, de asegurarles un futuro digno y lleno de oportunidades. La educación no puede esperar, es un derecho inalienable que debe ser protegido a toda costa.
Mientras tanto, en la Ciudad de México, el plantón de la CNTE en el zócalo capitalino continúa. A pesar de haber recibido respuesta del gobierno federal a la mayoría de sus peticiones, los maestros se mantienen firmes en su postura, dejando a miles de alumnos sin clases. La situación genera un debate complejo, donde se contraponen los derechos laborales de los docentes y el derecho a la educación de los niños y niñas. Encontrar un punto de equilibrio, una solución que satisfaga a ambas partes, se convierte en un desafío crucial para las autoridades y la sociedad en su conjunto. El futuro de la educación en Oaxaca, y en particular en la Sierra Norte, pende de un hilo. La esperanza reside en el diálogo, en la capacidad de encontrar soluciones que prioricen el bienestar de los alumnos y garanticen su derecho fundamental a una educación de calidad.
Fuente: El Heraldo de México