
2 de junio de 2025 a las 22:25
La mirada robada de Joshlin
La pesadilla de Joshlin Smith, una niña de tan solo seis años, continúa. Un año después de su desaparición, la justicia sudafricana ha condenado a cadena perpetua a su madre, Racquel "Kelly" Smith, junto a su novio, Jacquen Appolis, y un amigo, Steveno van Rhyn, por el aberrante delito de tráfico de personas y secuestro. La sentencia, si bien trae un cierto alivio, no cierra la herida más profunda: Joshlin sigue desaparecida.
El caso ha conmocionado a Sudáfrica y al mundo entero. La imagen de una madre vendiendo a su propia hija a un curandero tradicional, conocido como "sangoma", a cambio de una irrisoria suma de dinero, ha generado una ola de indignación y tristeza. El testimonio de un pastor, que asegura haber escuchado a Racquel Smith ofrecer a sus tres hijos por apenas 20,000 rands (aproximadamente 1,100 dólares), pinta un cuadro desolador de la desesperación y la degradación a la que la adicción a las drogas puede llevar a una persona.
Durante el juicio, detalles escalofriantes salieron a la luz. Según un testigo, el "sangoma" estaba interesado en los ojos y la piel de la pequeña Joshlin, presumiblemente para utilizarlos en rituales. Esta revelación ha aumentado la angustia de la familia y la preocupación por el destino de la niña. La pregunta que todos se hacen es: ¿dónde está Joshlin?
La abuela de la menor, visiblemente afectada por la situación, confrontó a su hija en la sala del tribunal: "¿Cómo duermes y vives contigo misma?". Una pregunta que resuena en la conciencia de todos y que pone de manifiesto la complejidad de este drama familiar. La adicción, la pobreza y la desesperanza parecen haber tejido una red trágica alrededor de Joshlin y su familia.
La sentencia de cadena perpetua, si bien ejemplarizante, no devuelve a Joshlin a su hogar. Las autoridades continúan con la búsqueda, pero el tiempo transcurrido y la falta de pistas concretas hacen que la esperanza se desvanezca poco a poco. Bianca van Aswegen, criminóloga y coordinadora nacional de Missing Children South Africa, ha expresado su alivio por la condena, pero ha insistido en la necesidad de redoblar esfuerzos para encontrar a la niña.
El caso de Joshlin Smith es un llamado de atención sobre la vulnerabilidad de los niños en contextos de pobreza y marginalidad. Es un recordatorio de la importancia de fortalecer las redes de apoyo familiar y comunitario, así como de implementar políticas públicas que aborden las causas estructurales de la desigualdad y la adicción. Mientras tanto, la búsqueda de Joshlin continúa, y la esperanza, aunque tenue, se mantiene viva en los corazones de quienes anhelan su regreso. #JoshlinVuelveACasa #NiñosNoSeTocan #JusticiaParaJoshlin.
Fuente: El Heraldo de México