En un día que quedará marcado en los anales de la historia jurídica de México, Lenia Batres Guadarrama, candidata número tres a ministra de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), ejerció su derecho al voto en la alcaldía Iztacalco de la Ciudad de México. Con la convicción resonando en sus palabras, Batres Guadarrama calificó las elecciones de este domingo como un hito sin precedentes, un proceso "histórico e inédito" con la fuerza transformadora para redefinir el panorama del Poder Judicial en todo el país.

Su voto, depositado en las urnas de Iztacalco, simboliza mucho más que un acto cívico individual. Representa la culminación de un proceso de apertura democrática que coloca a México a la vanguardia global. En palabras de la propia candidata, somos "el primer país en el mundo que democratiza su Poder Judicial", una afirmación que subraya la trascendencia de este momento y el liderazgo de México en la construcción de un sistema judicial más participativo y representativo de la voluntad popular.

Batres Guadarrama, abogada de profesión con una amplia trayectoria en el ámbito jurídico, destacó la importancia de que las decisiones judiciales sean permeadas por la voz del pueblo. "Una ruta hacia el progreso", así definió este nuevo paradigma donde la ciudadanía se convierte en protagonista del cambio, influyendo directamente en la conformación del máximo órgano de justicia del país. Un cambio que, en su visión, no sólo moderniza las estructuras del Poder Judicial, sino que fortalece el Estado de Derecho al alinearlo con las necesidades y aspiraciones de la sociedad mexicana en su conjunto.

Más allá de la solemnidad del acto electoral, la candidata mostró su lado más humano y cercano a la gente. Con la sencillez que la caracteriza, compartió con la prensa sus planes para después de votar: un tradicional desayuno de carnitas en un establecimiento cercano a las casillas. Una imagen que contrasta con la formalidad del proceso electoral y que humaniza la figura de quien aspira a ocupar uno de los cargos más importantes del sistema judicial mexicano. Este gesto, aparentemente trivial, revela la conexión de Batres Guadarrama con las costumbres y la vida cotidiana del pueblo al que aspira a servir.

La jornada electoral de este domingo marca un punto de inflexión en la historia del Poder Judicial de México. Un cambio impulsado por la participación ciudadana y la convicción de construir un sistema de justicia más democrático, transparente y representativo. Lenia Batres Guadarrama, con su voto y sus palabras, se posiciona como una figura clave en este proceso de transformación, enarbolando la bandera de un Poder Judicial más cercano a la gente, que escuche y responda a las demandas de justicia de todos los mexicanos. El futuro del Poder Judicial está en marcha, y México, una vez más, se erige como pionero en la construcción de un sistema judicial más justo y democrático para todos. Las carnitas, sin duda, tendrán un sabor especial este domingo.