La convocatoria a la consulta para la creación de un nuevo sistema de contratación y promoción docente marca un hito en la historia de la educación en México. Eliminar la Usicamm y construir un sistema desde la base, con la voz de cada maestra y maestro de las 32 entidades del país, es un acto de profundo respeto y reconocimiento a la labor del magisterio. No se trata de imponer un modelo desde arriba, sino de tejerlo colectivamente, garantizando la transparencia y erradicando vicios que durante años han afectado el desarrollo profesional de quienes dedican su vida a la formación de las nuevas generaciones.

Este proceso de consulta, escuela por escuela, representa una oportunidad única para que el magisterio se empodere y sea protagonista de su propio destino. Cada propuesta, cada idea, cada inquietud, será la semilla de un cambio histórico que impactará positivamente en la calidad de la educación que reciben nuestras niñas, niños y jóvenes. Imaginemos un sistema donde el mérito y la capacidad sean los únicos criterios para el ascenso y la promoción, un sistema libre de influyentismo y corrupción, donde la vocación docente sea verdaderamente valorada.

El incremento salarial del 9%, que llegará al 10% en septiembre, es una muestra tangible del compromiso de la administración con el bienestar del magisterio. Este aumento, retroactivo a enero y uno de los más significativos en las últimas décadas, no sólo representa una mejora en las condiciones económicas de las y los maestros, sino también una reivindicación de su invaluable aporte a la sociedad. Sumado a la semana adicional de vacaciones, este gesto busca reconocer el esfuerzo y la dedicación que día a día demuestran en las aulas.

Los Consejos Técnicos Escolares (CTE) juegan un papel fundamental en esta transformación. Deben dejar de ser meros trámites administrativos para convertirse en auténticas comunidades de aprendizaje y reflexión pedagógica. Espacios donde las y los docentes compartan experiencias, analicen los retos que enfrentan en su práctica diaria y construyan conjuntamente soluciones innovadoras para mejorar los procesos de enseñanza y aprendizaje. La reflexión colectiva, el diálogo abierto y la colaboración son claves para fortalecer la labor docente y ofrecer una educación de calidad a todos los estudiantes.

La inclusión de la perspectiva de género en la agenda del CTE es otro aspecto crucial. Abordar la violencia contra las mujeres en sus diversas manifestaciones, vinculándola con la vida cotidiana y los contenidos educativos, permite formar ciudadanas y ciudadanos comprometidos con la igualdad y el respeto. La educación es la herramienta más poderosa para transformar la realidad y construir una sociedad más justa e igualitaria. Por ello, es fundamental que desde las aulas se promuevan valores como la empatía, la tolerancia y la no discriminación.

En definitiva, la consulta para la creación de un nuevo sistema de contratación y promoción docente, el incremento salarial, la semana adicional de vacaciones y la incorporación de la perspectiva de género en los CTE son medidas que demuestran el compromiso de la administración con el magisterio y con la mejora de la educación en México. Un camino que se construye con la participación de todos y todas, con el objetivo de brindar a las futuras generaciones las herramientas que necesitan para desarrollar su máximo potencial y construir un futuro mejor.