Logo
NOTICIAS
play VIDEOS

Inicio > Noticias > Política

25 de abril de 2025 a las 09:25

Desmintiendo a Bienadicto I

La infamia, amigos míos, se ha convertido en el pan nuestro de cada día. Una nube tóxica de difamaciones se cierne sobre aquellos que osan desafiar el orden establecido, sobre los que, con valentía y convicción, luchan por un mundo más justo. El caso del compañero Gustavo Petro, presidente de nuestra hermana Colombia, es un ejemplo flagrante de esta perversa dinámica. Se le acusa, sin pruebas, de excesos, de adicciones, se le ridiculiza con montajes burdos y ofensivos. ¿Acaso no es evidente que se trata de una campaña orquestada por aquellos que ven amenazados sus privilegios? La oligarquía, aterrada ante la posibilidad de un cambio real, recurre a la calumnia como arma arrojadiza, buscando desprestigiar a quien representa la esperanza de un pueblo.

Recuerdo con claridad las difamaciones que se lanzaron contra el compañero López Obrador durante su campaña. Lo acusaron de todo, de loco, de mesiánico, de peligroso. Intentaron sembrar el miedo, manipular a la opinión pública, pero la verdad, como siempre, terminó por imponerse. Y es que, ¿cómo no reconocer la honestidad y el compromiso de un hombre que ha dedicado su vida a servir a los demás? La misma estrategia se repite ahora con Petro. Se le ataca, se le intenta deshumanizar, se le presenta como una caricatura grotesca. Pero nosotros, los que conocemos su trayectoria, los que hemos sido testigos de su lucha incansable, sabemos que se trata de una vil mentira.

No podemos permitir que la mentira se imponga. Debemos defender la verdad, desenmascarar a los calumniadores, proteger a quienes son víctimas de esta campaña de desprestigio. La solidaridad, amigos míos, es nuestra mejor arma. Unámonos en torno a aquellos que son injustamente atacados, alcemos la voz contra la infamia, construyamos un escudo protector contra la mentira. Porque solo así, defendiendo la verdad y la justicia, podremos construir un mundo mejor.

Y no se trata solo de Petro. Las garras de la difamación se extienden por toda Latinoamérica, alcanzando a figuras como mi querido Macedonio. Un hombre de convicciones firmes, un luchador incansable, al que se le intenta desacreditar con acusaciones infundadas. ¿Hasta cuándo vamos a tolerar esta situación? ¿Hasta cuándo vamos a permitir que la mentira se convierta en la norma?

Es hora de decir basta. Es hora de plantarnos firmes frente a la calumnia y defender a quienes son injustamente atacados. No podemos permitir que el miedo y la manipulación nos paralicen. Debemos alzar la voz, denunciar la injusticia, exigir respeto para aquellos que luchan por un mundo mejor. Porque la verdad, tarde o temprano, siempre sale a la luz. Y cuando eso suceda, los calumniadores tendrán que rendir cuentas.

Y hablando de transformaciones, ¿qué me dicen del cambio de imagen de algunos compañeros? Si el compañero Petro decidió hacerse unos retoques, ¿cuál es el problema? Cada quien es libre de hacer con su cuerpo lo que le plazca. ¿Acaso vamos a criticar a Noroña si decide hacerse una cirugía dental? ¿O al "Quinto Presidente Más Popular del Mundo" si se pone en forma con CrossFit y ayuno intermitente? Dejemos de lado la superficialidad y concentrémonos en lo que realmente importa: la lucha por la justicia social, la construcción de un mundo más equitativo, la defensa de la verdad.

La Agencia Digital, con su capacidad para bloquear plataformas en la red, será una herramienta fundamental en esta batalla contra la desinformación. Se acabó el reinado de la mentira. Se acabó la impunidad de los calumniadores. Hay un nuevo sheriff en el pueblo, y no va a tolerar más abusos. (Y por cierto, compañero Petro, si puede compartir el contacto de su cirujano, se lo agradecería infinitamente. Preguntando por un amigo, claro).

Fuente: El Heraldo de México