
22 de abril de 2025 a las 22:30
Evita la multa: ¡Limpia las heces de tu perro!
En Nuevo León, la convivencia armoniosa entre ciudadanos y animales de compañía es una prioridad. La Ley de Protección y Bienestar Animal, un marco legal vanguardista, no solo protege a los animales de la violencia y el abandono, sino que también considera el impacto de la tenencia responsable en la comunidad. Un aspecto crucial de esta ley se centra en la gestión de los desechos de las mascotas, un tema que a menudo genera debate y controversia.
La norma, con un enfoque integral, busca educar y sensibilizar a la población sobre la importancia de mantener limpios los espacios públicos. Más allá de una simple cuestión de estética, recoger las heces de nuestras mascotas es un acto de civismo que impacta directamente en la salud pública, previniendo la propagación de enfermedades y parásitos. Imagine un parque infantil donde los niños juegan libremente, un espacio verde donde las familias disfrutan del aire libre, ¿acaso no merecen un entorno limpio y seguro? La responsabilidad recae en cada uno de nosotros, los dueños de mascotas, de asegurar que nuestras queridas compañías no contribuyan a la contaminación de estos espacios comunes.
El Artículo 127 de la Ley de Protección y Bienestar Animal de Nuevo León, con firmeza pero también con justicia, establece que permitir que un animal defeque en la vía pública sin la recolección inmediata de las heces constituye una falta administrativa. Esta medida, lejos de ser arbitraria, busca fomentar la responsabilidad y el respeto por el entorno. La sanción, que puede variar desde una amonestación hasta una multa considerable, se gradúa en función de la gravedad de la infracción y las posibles consecuencias derivadas de la misma. Este sistema flexible permite a las autoridades aplicar la ley con criterio y proporcionalidad, considerando las circunstancias específicas de cada caso.
Es importante destacar que la intención principal de la ley no es punitiva, sino educativa. Se busca promover una cultura de la responsabilidad entre los dueños de mascotas, incentivando el cumplimiento de la norma a través de la concientización y la comprensión de su importancia. La multa, si bien es una herramienta disuasiva, no es el objetivo final. El verdadero propósito es lograr un cambio de comportamiento que beneficie a toda la comunidad.
La posibilidad de denunciar anónimamente cualquier acto de incumplimiento de la ley refuerza el compromiso ciudadano con el bienestar animal y la convivencia pacífica. Este mecanismo permite a cualquier persona, sin temor a represalias, reportar situaciones que pongan en riesgo la salud pública o el bienestar de los animales. La denuncia anónima, además de ser una herramienta eficaz para el cumplimiento de la ley, fomenta la participación ciudadana y la corresponsabilidad en la construcción de una sociedad más justa y respetuosa.
En definitiva, la Ley de Protección y Bienestar Animal de Nuevo León se presenta como un modelo a seguir en la búsqueda del equilibrio entre la tenencia responsable de mascotas y el respeto por el espacio público. Un marco legal que, con un enfoque integral y educativo, promueve la convivencia armoniosa entre ciudadanos y animales, construyendo una sociedad más consciente, responsable y comprometida con el bienestar de todos.
Fuente: El Heraldo de México