
22 de abril de 2025 a las 19:30
Adiós al Maestro: Homenaje al Director de la OSSLP
La tensión se palpaba en el aire, un silencio denso cargado de emociones contenidas que precedió al estallido. El Teatro de la Paz, un escenario usualmente reservado para la armonía de las notas musicales, se convirtió en el epicentro de una disonancia inesperada. El homenaje póstumo a José Miramontes Zapata, fundador y director de la Orquesta Sinfónica de San Luis Potosí, se vio teñido por la sombra de la protesta. Las solemnes palabras de los oradores, los recuerdos emotivos compartidos por familiares y miembros de la comunidad cultural, se vieron interrumpidos por el clamor de un sector inconforme.
No fueron las melodías las que resonaron en el majestuoso teatro, sino las rechiflas dirigidas al Secretario General de Gobierno, J. Guadalupe Torres Sánchez, representante del gobernador Ricardo Gallardo Cardona. Un grito solitario, pero cargado de significado, rompió el protocolo: "¡Salud para la Sinfónica!". Una frase que trascendía el ámbito musical, convirtiéndose en un grito desesperado por la salud laboral y la seguridad social de los trabajadores de la Secretaría de Cultura.
La raíz del descontento se encuentra en la decisión del gobierno gallardista-Verde de retirar el servicio médico del IMSS y el servicio privado a miles de burócratas estatales. Una medida que ha generado incertidumbre y precariedad en el sector, y que encontró en el homenaje al maestro Miramontes un espacio para manifestarse. Ante la presión, Torres Sánchez se comprometió a “analizar” la demanda, una promesa que deberá ser concretada para apaciguar los ánimos.
Por su parte, el Secretario de Cultura, Mario García Valdez, intentó minimizar la protesta, apelando al respeto por el momento y el lugar. "En este momento ese no es el tema", declaró, argumentando que el velorio del maestro Miramontes no era el espacio para discutir temas gubernamentales. Sin embargo, la realidad es que la precariedad laboral no respeta escenarios ni protocolos, y la voz de los trabajadores se alzó, incluso en medio del dolor y la solemnidad.
Este episodio se suma a un contexto de tensiones laborales que se ha agudizado en los últimos tiempos. La reciente muerte de Bernardina Lara Argüelles, quien durante 30 años lideró el Sindicato Único de Trabajadores al Servicio del Gobierno del Estado (SUTSGE), deja un vacío en la representación sindical. Lara Argüelles, desde la llegada de Gallardo Cardona, protagonizó huelgas y plantones en defensa de los derechos laborales, luchando contra los despidos masivos y la cancelación de prestaciones. Actualmente, el SUTSGE se encuentra inmerso en un proceso de renovación de su Mesa Directiva, en un momento crucial para el futuro de los trabajadores del estado.
La protesta en el Teatro de la Paz es un síntoma de la profunda inquietud que se vive en el sector público. La demanda por la restitución del servicio médico es un clamor por la dignidad laboral y la seguridad social, y se convierte en un desafío para el gobierno estatal. ¿Será capaz de escuchar las voces de los trabajadores y ofrecer soluciones concretas? El futuro de la relación entre el gobierno y sus empleados depende, en gran medida, de la respuesta que se dé a esta pregunta. La armonía social, al igual que la musical, requiere de un delicado equilibrio y un diálogo constante.
Fuente: El Heraldo de México