
21 de abril de 2025 a las 05:00
Tragedia en Veracruz: Menor pierde la vida en el agua
La tragedia tiñe de luto las costas veracruzanas. En un cruel recordatorio de los peligros ocultos bajo la aparente calma del mar, un adolescente de tan solo 15 años perdió la vida en las aguas de la playa La Mancha, en el municipio de Actopan. Este lamentable suceso, ocurrido durante el primer fin de semana de la Semana Santa, marca la segunda víctima por ahogamiento en menos de 24 horas en la misma zona, dejando una profunda huella de dolor en la comunidad y encendiendo las alarmas sobre la seguridad en las playas durante este periodo vacacional.
El joven, originario de Tlaxcala, se encontraba disfrutando de un paseo familiar y refrescándose a la orilla del mar cuando la fuerza implacable del oleaje lo arrastró mar adentro. Testigos presenciales describen escenas de angustia y desesperación mientras la familia del menor pedía auxilio a gritos. De inmediato, elementos de seguridad y salvavidas se movilizaron para iniciar la búsqueda y rescate, una lucha contra el tiempo y las bravas olas que lamentablemente culminó con el hallazgo del cuerpo sin vida del adolescente.
Este trágico incidente se suma al ocurrido apenas un día antes, el 18 de abril, en la playa Villa Rica, también en Actopan, donde un hombre de 33 años, proveniente de la Ciudad de México, perdió la vida en circunstancias similares. La corriente marina, un enemigo silencioso y poderoso, lo arrastró lejos de la orilla sin que pudiera oponer resistencia, arrebatándole la vida en cuestión de minutos. Su cuerpo fue encontrado posteriormente, sumiendo a otra familia en la tristeza y el dolor.
La mañana del 19 de abril, la misma playa La Mancha fue escenario de otro episodio de angustia, aunque esta vez con un final afortunadamente distinto. Tres personas fueron rescatadas con vida del abrazo mortal del mar, tras ser arrastradas por la corriente. Uno de los rescatados requirió atención médica debido a una crisis nerviosa, un testimonio palpable del terror vivido ante la inminencia de la muerte.
Estos sucesos, tan cercanos en el tiempo y el espacio, ponen de manifiesto la importancia de extremar las precauciones al disfrutar de las playas, especialmente durante periodos vacacionales con alta afluencia de visitantes. Es fundamental respetar las indicaciones de las autoridades, prestar atención a las banderas de señalización que indican el estado del mar y, sobre todo, evitar adentrarse en zonas con fuerte oleaje o corrientes peligrosas. La belleza del mar puede ser engañosa, y su fuerza, implacable.
La vigilancia y la prevención son claves para evitar futuras tragedias. Es necesario reforzar la presencia de salvavidas en las playas, así como implementar campañas de concientización dirigidas tanto a residentes como a turistas sobre los riesgos del mar y las medidas de seguridad que deben adoptarse. La vida es un regalo invaluable, y protegerla debe ser nuestra prioridad. El recuerdo de estos jóvenes truncados en la flor de la vida debe servir como un llamado a la responsabilidad y a la prudencia, para que el disfrute de nuestras playas no se convierta en una experiencia dolorosa e irreparable.
Fuente: El Heraldo de México