La sombra de la tragedia se cierne sobre el brillo vacacional en Nuevo León. Mientras el estado se engalana para recibir a un millón de visitantes en sus pintorescos parajes turísticos, un escalofriante dato empaña la alegría de la Semana Santa: 14 fallecimientos registrados en tan solo la primera semana, un aumento del 40% comparado con el mismo periodo del año anterior. El eco de las sirenas y el lamento de las familias enlutan un panorama que, de otra manera, sería idílico.

El Director de Protección Civil, Erick Cavazos Cavazos, ha alzado la voz para señalar a los principales culpables de esta tragedia: la velocidad desenfrenada en las carreteras, el consumo irresponsable de alcohol, la fatiga al volante y la inexperiencia al aventurarse en los desafiantes senderos de las montañas neoleonesas. Diez vidas segadas en el asfalto, tres más arrebatadas por las traicioneras aguas, un saldo doloroso que nos obliga a reflexionar sobre la importancia de la prudencia y la responsabilidad durante estos días de descanso.

Las cifras, frías e implacables, nos dibujan un panorama preocupante. Si bien el año 2024 registró 10 decesos en este periodo, 51 personas perdieron la vida en accidentes viales a lo largo del año, dejando a su paso un rastro de 37 heridos. Las montañas, con su belleza imponente, también cobraron su cuota: 11 rescates, seis de ellos con lesionados. El recuerdo de los años anteriores, aunque con cifras menores, nos recuerda que la tragedia siempre acecha: una vida perdida en 2023, tres en 2022 y 16 en 2021. Una cadena de sucesos que nos invita a preguntarnos: ¿qué estamos haciendo mal?

Pero no todo está perdido. Ante la adversidad, el espíritu de servicio y la solidaridad se hacen presentes. Más de 900 elementos de rescate y seguridad pública se han desplegado a lo largo y ancho del estado, vigilando carreteras, presas y áreas recreativas, brindando orientación y apoyo a los turistas. Un ejército de ángeles guardianes que trabajan incansablemente para prevenir nuevas tragedias y garantizar la seguridad de todos.

La titular de la dependencia, Erika Vázquez Cavazos, ha reiterado el compromiso de mantener las brigadas de vigilancia durante la semana de Pascua, del 21 al 25 de abril. Un llamado a la precaución, una exhortación a la responsabilidad, un mensaje de esperanza en medio de la tristeza. La vida es un regalo precioso que debemos cuidar, especialmente durante estos días de descanso y convivencia familiar. Disfrutemos de la belleza de Nuevo León, pero hagámoslo con responsabilidad, con prudencia, con conciencia. Que la alegría de las vacaciones no se tiña de luto.