Un susto monumental se vivió en la tarde de ayer en el Aeropuerto Internacional de Orlando, cuando el motor derecho de un avión de Delta Air Lines se incendió justo cuando la aeronave se preparaba para despegar rumbo a Atlanta. Cerca de 200 pasajeros vivieron momentos de angustia al ser evacuados de emergencia, mientras las llamas se extendían por el ala del avión. Afortunadamente, y según los reportes preliminares, no se registraron heridos ni lesionados durante el incidente.

Las imágenes del suceso, rápidamente difundidas en redes sociales bajo la etiqueta #DeltaAirlines, muestran la magnitud del incendio y la rápida respuesta de los equipos de emergencia del aeropuerto. El humo negro y denso que emanaba del motor afectado se podía observar a kilómetros de distancia, generando una gran conmoción entre los presentes y alertando a las autoridades aeroportuarias.

Testigos presenciales describen la escena como “surrealista” y “aterradora”. Muchos de los pasajeros, aún conmocionados, relataron cómo sintieron una fuerte vibración seguida de un ruido ensordecedor justo antes de que la tripulación anunciara la emergencia y se iniciara el protocolo de evacuación. La rápida actuación del personal de cabina y la serenidad que mantuvieron en todo momento fueron cruciales para evitar que el pánico se apoderara de los pasajeros.

Delta Air Lines, por su parte, ha emitido un comunicado oficial en el que confirma el incidente y asegura estar colaborando plenamente con las autoridades para esclarecer las causas del incendio. La aerolínea ha puesto a disposición de los pasajeros afectados asistencia psicológica y ha reprogramado sus vuelos a Atlanta, garantizando su traslado lo antes posible. Además, han reiterado su compromiso con la seguridad de sus pasajeros y han anunciado una exhaustiva revisión de la aeronave siniestrada.

Este incidente pone de manifiesto, una vez más, la importancia de las estrictas medidas de seguridad en la aviación y la constante capacitación del personal para responder ante situaciones de emergencia. Si bien las causas del incendio aún están bajo investigación, es fundamental que se realicen las inspecciones necesarias para garantizar que un evento similar no vuelva a ocurrir. La confianza de los pasajeros en la seguridad aérea es primordial, y incidentes como este pueden generar un impacto negativo en la industria.

Mientras las autoridades continúan investigando, la comunidad aeronáutica espera con ansias los resultados del peritaje para comprender las causas de este incidente y poder implementar medidas preventivas que refuercen la seguridad de todos los vuelos. La prioridad, sin duda, es la seguridad de los pasajeros y la tranquilidad de quienes confían en el transporte aéreo para conectar con el mundo. Seguiremos informando a medida que se disponga de más información.