
21 de abril de 2025 a las 15:25
Adiós al Papa Francisco: Sigue la transmisión en vivo
El mundo se viste de luto. La noticia ha resonado como un trueno en la calma de la mañana: el Papa Francisco ha fallecido. Una profunda tristeza embarga a millones de fieles alrededor del globo, quienes hoy despiden a un líder espiritual que trascendió las barreras de la religión para convertirse en un símbolo de humildad, compasión y lucha por la justicia social. El Cardenal Kevin Joseph Farrel, con voz quebrada por la emoción, confirmó la noticia que nadie quería escuchar. Sus palabras, cargadas de dolor, pintaron el retrato de un hombre entregado a Dios y a su pueblo, un pastor incansable que dedicó su vida al servicio de los demás, especialmente de los más vulnerables, de aquellos a quienes la sociedad muchas veces olvida.
Su pontificado, marcado por la sencillez y la cercanía, deja una huella imborrable en la historia de la Iglesia Católica. Francisco, el Papa que eligió el nombre del santo de Asís, abrazó la pobreza como un camino para acercarse a los necesitados. Su mensaje de amor y reconciliación resonó con fuerza en un mundo fragmentado por la desigualdad y la violencia. Recordaremos sus gestos de ternura hacia los enfermos, su abrazo a los migrantes, su llamado a la protección del medio ambiente, su incansable lucha por la paz.
Su última aparición pública, en la bendición Urbi et Orbi del domingo de Pascua, se presenta ahora como una despedida premonitoria. A pesar de su delicado estado de salud, Francisco quiso estar presente, una vez más, junto a sus fieles. Recorrer la plaza de San Pedro en el papamóvil, a pesar de la fragilidad de su cuerpo, fue un acto de amor y entrega que quedará grabado en la memoria colectiva. Un último adiós lleno de simbolismo, un testimonio de su inquebrantable espíritu de servicio.
En México, el tañido de la campana mayor de la Catedral Metropolitana resonó en el corazón de la nación. La Presidenta Claudia Sheinbaum, visiblemente conmovida, expresó su pesar por la partida del Pontífice. Sus palabras destacaron el humanismo de Francisco, su opción preferencial por los pobres y su incansable búsqueda de la paz y la igualdad. Un legado que, sin duda, seguirá inspirando a generaciones futuras.
La partida del Papa Francisco deja un vacío inmenso en la Iglesia y en el mundo. Pero su mensaje de amor, compasión y esperanza permanece vivo en el corazón de millones. Su ejemplo de humildad y servicio nos invita a construir un mundo más justo y fraterno, un mundo donde la dignidad de cada ser humano sea respetada y valorada. Que su alma descanse en paz. Que su legado nos ilumine en el camino hacia un futuro mejor. El mundo llora la partida de un pastor, de un líder, de un hombre bueno. Pero su memoria, como una llama inextinguible, seguirá iluminando el camino de la esperanza. El Papa Francisco ha partido, pero su mensaje permanece. Y ese mensaje, hoy más que nunca, es un llamado a la unidad, a la solidaridad, a la construcción de un mundo donde reine la paz y el amor.
Fuente: El Heraldo de México