La última creación del genio detrás de "Yo soy Betty, la fea", Fernando Gaitán, llega para cautivarnos con una nueva dosis de humor y una profunda exploración de las relaciones humanas. "Yo no soy Mendoza", protagonizada por Vadhir Derbez y Elyfer Torres, promete ser una montaña rusa de emociones, con giros inesperados que mantendrán al público en vilo. Derbez describe la serie como una obra llena de personajes “redonditos”, con una complejidad y profundidad que nos permitirá conectar con ellos a nivel personal. Al igual que su predecesora, "Yo no soy Mendoza" nos presenta personajes entrañables, pero esta vez, envueltos en una trama aún más intrincada y llena de conflictos que prometen mantenernos al borde del asiento.

La historia gira en torno a Julián García, un oficinista común y corriente, cuya vida da un giro inesperado al descubrir su asombroso parecido con Esteban Mendoza, un acaudalado empresario que necesita desaparecer por un tiempo. Este intercambio de identidades obligará a Julián a asumir la vida de Mendoza, incluyendo un matrimonio forzado y una serie de amenazas que pondrán en peligro su propia existencia. Imaginen el caos y las situaciones cómicas que se desencadenarán cuando un hombre sencillo se vea obligado a navegar en un mundo de lujos, poder y peligros que le son completamente ajenos.

El elenco, una mezcla de talento colombiano y mexicano, rinde homenaje a la herencia del creador de la serie. Elyfer Torres, quien da vida a Cindy, un personaje descrito como "extremadamente posesiva y tóxica", nos invita a reflexionar sobre las relaciones dañinas que a menudo normalizamos. Su interpretación promete ser un espejo para muchos, mostrando las consecuencias de la toxicidad y la importancia de establecer límites sanos en nuestras relaciones. Torres destaca la relevancia de este personaje, ya que nos permite analizar cómo normalizamos conductas tóxicas y cómo estas pueden afectar no solo a quienes nos rodean, sino también a nosotros mismos.

Vadhir Derbez, por su parte, resalta el ingenio de la serie al abordar temas complejos con un toque de humor. “Con la comedia, la gente acepta mejor estos mensajes”, afirma. La serie utiliza la risa como vehículo para la reflexión, permitiéndonos asimilar las lecciones sin la pesadez del drama, logrando así una mayor conexión con la audiencia. El actor incluso bromea sobre sus propias experiencias con relaciones tóxicas, enfatizando la importancia de identificarlas y evitar normalizarlas.

Interpretar el doble papel de Julián y Esteban representó un desafío actoral para Derbez, quien se sumergió en un intenso proceso de preparación junto a un coach actoral. El objetivo era dotar a cada personaje de una identidad y voz propia, prestando atención a los detalles más sutiles. Desde la respiración y la forma de comer, hasta la manera de hablar y moverse, cada elemento fue cuidadosamente construido para diferenciar a estos dos hombres, unidos por su apariencia física, pero separados por sus circunstancias y personalidades. El resultado, según el propio actor, es un trabajo del que se siente profundamente satisfecho, un logro que sin duda enriquecerá la experiencia del espectador. “Yo no soy Mendoza” promete ser una serie que nos hará reír, reflexionar y, sobre todo, nos recordará la genialidad del inolvidable Fernando Gaitán.